Las transferencias internacionales de grandes armas se han mantenido en el mismo nivel en los períodos 2011-2015 y 2016-2020 y, aunque ha aumentado significativamente las transferencias de tres de los cinco principales exportadores de armas –Estados Unidos, Francia y Alemania– se ha compensado con la reducción de China y Rusia, según un estudio.
El Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI, por sus siglas en inglés) ha publicado un informe en el que se refleja que por primera vez desde el período 2001-2005 el volumen de transferencias de grandes armas entre países no ha crecido.
No obstante, advierten las cifras, las transferencias internacionales se mantienen cerca del nivel más alto desde el final de la guerra fría.
«Es demasiado pronto para decir si el periodo de rápido crecimiento de las transferencias de armas de las dos décadas anteriores se ha detenido», advierte el investigador senior del Programa de Armas y Gasto Militar del SIPRI, Pieter D. Wezeman.
Wezeman hace referencia a factores recientes a tomar en cuenta en este análisis, como por ejemplo el impacto económico de la pandemia de la COVID-19, que «podría provocar que, en los próximos años, algunos países reconsideraran sus importaciones de armas. Sin embargo, al mismo tiempo, incluso en el pico más alto de la pandemia en 2020, varios países firmaron cuantiosos contratos de grandes armas», lamenta.
El documento también recoge que las importaciones de armas por parte de Oriente Próximo han crecido un 25 por ciento, con Arabia Saudí a la cabeza –un 61 por ciento más–, seguido de Egipto –un 136 por ciento más– y Qatar –un 361 por ciento más–.
Sin embargo, Asia y Oceanía ha sido la región que más grandes armas ha importado, el 42 por ciento del total de las transferencias de 2016-20. India, Australia, China, Corea del Sur y Pakistán fueron los principales importadores de la región.
Entre los motivos para las altas cifras de importación en esta región destaca «la creciente percepción de China como una amenaza», detalla Wezeman.
EEUU, PRIMER PROVEEDOR DEL MUNDO
Más de un tercio de las armas globales vendidas en todo el mundo durante los últimos cinco años se originaron en Estados Unidos, lo que subraya su papel como principal vendedor de armas del mundo. De hecho, ha aumentado su porcentaje en las exportaciones mundiales del 32 al 37 por ciento.
En el período 2016-2020, suministró grandes armas a 96 países, siendo casi la mitad de sus transferencias a Oriente Próximo.
El segundo país exportador es Rusia, mientras que Francia y Alemania se sitúan en tercer y cuarto lugar, respectivamente, dejando a China en quinto lugar. Tanto Rusia como China han sufrido caídas en sus exportaciones, mientras que Francia ha incrementado un 44 por ciento sus exportaciones de grandes armas y contabilizó el 8,2 por ciento de las exportaciones mundiales.
Alemania, por su parte, ha aumentado un 21 por ciento sus exportaciones de grandes armas.
El informe también recoge que las exportaciones de Reino Unido han caído un 27 por ciento, mientras que las de Israel han crecido un 59 por ciento entre 2016-2020 respecto al período anterior. Además, entre estos períodos ha habido un descenso generalizado de las importaciones de armas por parte de los países de África –un 13 por ciento menos–, América –un 43 por ciento menos– y Asia y Oceanía –un 8,3 por ciento menos–.