Más que un viajero, el español Danny Camacho se ha convertido en una voz itinerante de los que no son escuchados. Diseñador gráfico de profesión, este emprendió en agosto de 2022 un periplo “sin billete de vuelta” que lo llevó a descubrir diferentes temáticas sociales, ecológicas y de derechos humanos.
Sus materiales están disponibles en redes sociales como YouTube e Instagram y en su página web llamada Soy Fugitivo. “Decidí salir de mi zona de confort y viajar documentando historias a través de mis experiencias”, afirma el creador de contenidos, quien ha publicado material sobre su reciente viaje al Amazonas ecuatoriano.
Cultura y clamor por la justicia
Tras visitar algunas comunidades de África y otras localidades de Latinoamérica, Camacho decidió adentrarse en la selva amazónica ecuatoriana. Allí visibilizó una realidad que compara con la tragedia nuclear de Chernobyl, por el nivel de contaminación que existe en diversas reservas acuíferas y caminos naturales.
En su canal de YouTube, Danny visita la selva guiado por habitantes de la zona, quienes le muestran cómo la explotación petrolera contamina suelos y acuíferos. En los próximos meses, el apasionado aventurero continuará subiendo a sus redes sociales las vivencias que experimentó en este territorio.
“Conocí los Siekopais, ubicado en el río Aguarico, pude saber más sobre su cosmovisión y fue la primera vez que tomé yagé con un chamán de 107 años”, comenta Camacho para describir su periplo por culturas ancestrales cuyas enseñanzas son muy valiosas para la humanidad. Además, documentó su sorpresa ante las acciones que emprende la comunidad A’i Cofán de Sinangoe para resguardar sus tierras de la acción de empresas extranjeras, como el uso de cámaras de movimiento, comunicados con radios y patrullaje por el río en busca de posibles intrusos.
Las etnias y sus misterios
Otra de las experiencias vividas por Danny fue su acercamiento a la etnia de los Kichwas, de quienes asegura que se está perdiendo su cultura, debido a la pérdida de su idioma nativo, sus tradiciones y costumbres. Sin embargo, recopiló fotografías y vídeos sobre la relación de este grupo social con la danza, el tabaco, las guayas y la importancia que le dan a la familia.
El misterioso territorio Shuar, donde se desarrolla la leyenda del Jurijiri, protector de la selva capaz de reducir cabezas, también fue objeto de estudio de este apasionado viajero. Finalmente, Danny pasó una semana conociendo las enseñanzas de un chamán que le invitó a aprender sobre plantas medicinales y los rituales en torno a la bebida Ayahuasca, cuyo efecto genera visiones como señales de comunicación con los espíritus.
Danny continúa hacia nuevos rumbos para seguir difundiendo su testimonio sobre barrios desfavorecidos, violaciones de derechos humanos, y expediciones a sitios insólitos. La labor de comunicar estas realidades es su propósito de vida.