El valor de la Generación “Silver”
El aumento de la esperanza de vida es posiblemente el cambio socioeconómico más importante de la historia de la humanidad. Y gracias a este hecho podríamos decir que asistimos a la aparición de una nueva generación: la generación Silver.
La generación Silver con “S” mayúscula, en la que me incluyo con satisfacción, se caracteriza por estar formada por personas mayores de 55 años, plenamente activas y con la posibilidad de disfrutar 20 años extra a pleno rendimiento gracias a los avances médicos y al desarrollo y práctica de hábitos más saludables.
Un colectivo de personas que tenemos la oportunidad de reinventarnos y de seguir aportando durante mucho más tiempo y con particularidades que nos hacen singulares como: la experiencia, la agenda propia y gestión eficiente del tiempo, las ganas por descubrir nuevas experiencias, la concreción y autenticidad el interés por el poder o estatus entre nuestras prioridades.
El valor de esta generación reside en tres ámbitos: social, laboral y económico.
Valor social
El contexto social abarca todos los aspectos relacionados con la convivencia intergeneracional y las características de un nuevo perfil preocupado por su salud y su bienestar, con habilidades y competencias personales, profesionales y también digitales, vitalistas, comprometidos, con experiencia y ganas de compartirla y con una importante influencia social.
Hoy la adopción digital es un elemento fundamental de inclusión social y los “Silver” lo hemos entendido desde el primer momento, realmente no hemos crecido como otras generaciones con Internet, sino que nos hemos desarrollado con la red de redes por excelencia y hemos descubierto conjuntamente con ella sus debilidades y fortalezas.
Valor profesional
En el ámbito laboral o profesional, la no discriminación por razón de edad y el aprovechamiento del talento senior son los elementos clave.
Uno de los mayores retos de las empresas, en esta nueva economía, es la gestión de las distintas generaciones en el seno de la organización. Despreciar el talento senior, como está ocurriendo en algunas compañías, es un error letal de gestión que, sin duda, tendrá consecuencias negativas en sus resultados. Poner en valor su conocimiento y experiencia es, a la vez, un desafío y una oportunidad de reinvención profesional.
La aparición de talento independiente y de gran calidad en la Red ya está siendo un factor que cambiará el mundo laboral.
Valor económico
Ha surgido la “Silver Economy” como la actividad económica específica orientada a atender las necesidades y personas de la generación senior.
La Comisión Europea ha incluido el desarrollo de la economía de la generación Silver como una de las prioridades para las empresas en Europa.
El consumidor senior tiene poder adquisitivo y lo que es más importante, tiene suficiente tiempo para emplearlo en nuevas experiencias, consumo y ocio.
El consumo de los mayores de 60 años supone cerca de un tercio del consumo privado en Europa Occidental.
Incluso podríamos decir que los Silver están marcando algunas de las tendencias actuales de consumo, como el mayor cuidado del medio ambiente, el propósito de la marca, la preferencia por productos bio o la compra en tiendas de proximidad.
Las oportunidades para las empresas y startup son enormes y la Silver Economy se perfila como una gran revolución comercial constituyendo un mercado con enorme potencial.
Se está produciendo una “silverización” de los servicios y productos. Tenemos ejemplos claros en sectores como la banca, los seguros, la alimentación, la salud, el turismo y el ocio, entre otros.
La generación Silver aporta valor e impulsa la promoción de una actividad económica sostenible que brinda posibilidades de futuro a otras generaciones.
