KPMG es una de las grandes auditoras del mercado, y por tanto, una voz autorizada a la hora de hablar de la situación de las compañías: «La COVID-19 ha cambiado de golpe las prioridades de las empresas, que han alterado sus planes a corto plazo; también de instituciones, reguladores y Administraciones Públicas», señala Juan José Cano, consejero delegado de la firma. «En algunos servicios hemos percibido una menor demanda, y en otros se ha incrementado mucho, como en los relacionados con la transformación digital, financiación y reestructuración, optimización de procesos o asesoramiento fiscal y laboral para adaptarse a los cambios regulatorios», indica el directivo en el número uno de la revista Corporate.
Cano alaba la actuación de los trabajadores esenciales y de las medidas puestas en marcha para facilitar la financiación de las empresas o el mantenimiento del empleo. «En cuanto a la gestión política, creo que el conjunto de los ciudadanos hubiéramos deseado un mayor grado de consenso dada la gravedad de la situación, como por ejemplo ha sucedido en países de nuestro entorno», indica.
Por lo que se refiere a la salida de la crisis, incide en la necesidad de «fortalecer el incremento del tamaño medio de las empresas. España es un país de pymes, pero necesitamos incentivar el crecimiento de las empresas para que puedan contratar más y con mejores condiciones, invertir en innovación e internacionalización y mejorar su capacidad de competir».
Sus repuestas al completo, en el quiosco.