El conglomerado industrial japonés Sony obtuvo un beneficio neto atribuido de 459.634 millones de yenes (3.751 millones de euros) entre los meses de julio y septiembre, correspondientes al segundo trimestre de su año fiscal, que finalizará en marzo de 2021, lo que representa un incremento del 145% respecto del mismo periodo del ejercicio anterior, lo que ha llevado a la multinacional a elevar sus expectativas de resultados anuales.
Los ingresos trimestrales de Sony se mantuvieron en línea con los del mismo trimestre del ejercicio precedente, hasta 1,72 billones de yenes (14.036 millones de euros), con un incremento del 11,5% de la facturación del negocio de videojuegos, hasta 506.638 millones de yenes (4.135 millones de euros).
De su lado, la división de música aumentó un 5,3% sus ventas, hasta 230.868 millones de yenes (1.884 millones de euros), mientras que los ingresos de la unidad de películas disminuyeron un 2,6%, hasta 192.333 millones de yenes (1.570 millones de euros). Por su parte, el negocio de electrónica facturó un 2,3% más, hasta 504.658 millones de yenes (4.119 millones de euros), mientras que el área de imagen redujo un 1,2% sus ingresos, hasta 307.084 millones de yenes (2.506 millones de euros).
La compañía japonesa espera cerrar su actual ejercicio, que concluirá el 31 de marzo de 2021, con una cifra de negocio de 8,5 billones de yenes (69.380 millones de euros), un 3% más que en el ejercicio 2020, mientras que prevé alcanzar un beneficio neto atribuido de 800.000 millones de yenes (6.530 millones de euros), mejorando en un 57% su pronóstico del pasado mes de agosto y superando en un 37% sus resultados del ejercicio anterior.
«Se espera que las ventas consolidadas y los ingresos operativos para el año fiscal que finaliza el 31 de marzo de 2021 sean mayores que lo pronosticado en agosto por unas ventas más altas de lo esperado en juegos, música y servicios financieros, parcialmente compensadas por unas ventas inferiores a las esperadas en el segmento de imagen», explicó la compañía.