El ácido hialurónico, por su versatilidad, se puede trabajar tanto en la cara como en el cuerpo, es un tratamiento que se realiza sin anestesia y de forma ambulatoria, por este motivo es una de las tendencias estéticas del mundo.
Se trata de la técnica actual por excelencia para quienes buscan eliminar algunos signos del paso del tiempo sin pasar por el quirófano con productos que ya hacen parte del cuerpo.
Para obtener buenos resultados con este tratamiento se requiere de la experiencia de profesionales como los que trabajan en la Clínica Burgos con una amplia trayectoria. Ofrecen distintos tipos de tratamiento estético Barcelona, una ciudad en la que el ácido hialurónico es muy demandado.
El ácido hialurónico es de origen natural
El ácido hialurónico es una sustancia que produce el cuerpo humano y que cumple la función de mantener la piel hidratada y firme, por lo que es muy utilizado en el campo del tratamiento estético.
A medida que pasa el tiempo, el cuerpo produce menos cantidad de ácido hialurónico, lo que provoca una deshidratación más frecuente en la piel, la aparición de arrugas y la pérdida de volumen en el rostro, donde la flacidez gana lugar. Para contrarrestar esta situación la ciencia ha desarrollado un ácido hialurónico creado en un laboratorio a partir de una bacteria que es idéntico al original.
Dentro de los tratamientos que ofrece una institución de excelencia como la Clínica Burgos se encuentra el de ácido hialurónico lineal, que se aplica en la piel mediante pequeñas inyecciones. Tan inofensivos son los pinchazos que no requieren de ningún tipo de anestesia. Se indica, sobre todo, para pieles deshidratadas en las que las arrugas y los surcos ya empiezan a aparecer.
El producto también está indicado para dar volumen a las zonas de la cara y el cuello que lo perdieron. Por ejemplo, en las arrugas debajo de los labios o en las comisuras. También en los casos de flacidez leve o moderada en el cuello o cuando cae el perfil de la mandíbula.
Ventajas de la aplicación estética del ácido hialurónico
El ácido hialurónico presenta muchas ventajas dentro del campo del tratamiento estético. Se ha popularizado su uso por ser natural, lo que elimina cualquier tipo de riesgo alérgico y también porque es económico si se compara con cualquier tipo de procedimiento quirúrgico.
Por otra parte, se trata de un tratamiento temporal, pero no es algo preocupante, ya que se puede repetir a lo largo del tiempo. Al no tener contraindicaciones, es sumamente compatible con el organismo de cualquier persona. Por lo general, el efecto del ácido hialurónico dura, al menos un año.
En la Clínica Burgos se desarrolla tanto la aplicación del ácido hialurónico como otras técnicas estéticas que están dentro del campo de las antiarrugas.