A la hora de disfrutar de una experiencia vinícola chula, ningún lugar es tan perfecto como un bar de vinos.
Estos establecimientos están ganando popularidad en diversas ciudades alrededor del mundo por abrir paso a un ambiente relajado y acogedor que transmite el encanto de los viñedos y las bodegas por fuera de las regiones vitivinícolas.
Particularmente en Madrid, se encuentra un rincón que encapsula a la perfección esta esencia. Se trata de La Franchutería, un bar de vinos que fusiona lo mejor de los “terroirs” franceses y españoles, ofreciendo una experiencia culinaria y enológica singular para locales y visitantes de la capital.
Bajo un concepto innovador que reúne lo mejor de un restaurante francés y el placer de un buen vino, ha llegado a la ciudad de Madrid La Franchutería. Este bar de vinos propone un nuevo estándar de deleite para todos los sentidos al abordar a la comida y la bebida como complementos inseparables en una experiencia gourmet de alto nivel.
En La Franchutería no solo ofrecen una amplia variedad de vinos para degustar, sino que también proporcionan una experiencia gastronómica única, combinando sabores auténticos con el placer de descubrir nuevos matices en cada copa. A cargo de Laura, una mujer francesa cuya afición por la gastronomía y los vinos la ha llevado a dar un giro en su carrera profesional, La Franchutería es mucho más que un simple bar de vinos en Madrid.
Laura, certificada por el Wine and Spirit Education Trust (WSET), ha creado una carta de vinos diferente, privilegiando, tanto en España como en Francia, pequeñas bodegas que trabajan la vid con cuidado y que abrazan prácticas vitivinícolas respetuosas con el medioambiente. Desde vinos tintos elegantes hasta Orange Wines muy crujientes, la oferta de La Franchutería es una invitación a un viaje sensorial a través de los viñedos artesanales de Francia y España.
Además de vinos, La Franchutería ofrece una variedad de cervezas artesanales de grifo y embotelladas, de Francia y de España, para satisfacer todos los paladares. Las opciones de este restaurante francés en Madrid se complementan a la perfección con la propuesta de «slow food» del lugar, que celebra los productos artesanales de alta calidad provenientes de pequeños productores españoles y franceses. En este sentido, La Franchutería ha sido concebida como un bar-restaurante artesanal, cuya carta de alimentos resalta propuestas de picoteo sabroso y también algunos platos más contundentes. Entre tablas de embutidos y quesos, tentadoras tostas y pâtés, y clásicos como la rillette de pato y el Croque-Monsieur, los comensales pueden degustar delicias auténticas, que reflejan el patrimonio gastronómico francés y español con cada bocado.
La Franchutería se está convirtiendo en un auténtico referente del encanto francés en Madrid, invitando a sus visitantes a deleitarse con una experiencia de sabor que celebra la excelencia y el placer de compartir momentos alrededor de una buena copa de vino.
