La Comisión Europea ha aprobado este martes los planes de recuperación de Italia y Alemania, con los que ambos países quieren absorber durante los próximos cinco años 191.500 millones de euros y 25.600 millones de euros, respectivamente, procedentes del fondo comunitario anticrisis.
Además, Bruselas ha dado luz verde al plan de reformas e inversiones de Letonia con el que el país báltico accederá a 1.800 millones en transferencias del fondo europeo de recuperación que cuenta con un presupuesto total de más de 800.000 millones de euros.
La jefa del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen se ha desplazado a los tres países para comunicar en persona a los respectivos gobiernos la evaluación positiva de sus respectivas estrategias de reformas e inversiones. Así, se ha reunido en Riga con el primer ministro letón, Krisjanis Karins; en Berlín con la canciller alemana, Angela Merkel; y en Roma con el primer ministro italiano, Mario Draghi.
Precisamente el plan de recuperación diseñado por el gobierno que lidera el expresidente del Banco Central Europeo (BCE) es el más ambicioso de los presentados por los Estados miembros. Con él, Italia quiere acceder hasta 2026 a 68.900 millones en transferencias directas y a 122.600 millones en préstamos a devolver.
«Este nivel sin precedentes de inversiones, acompañado de reformas cruciales, ayudará a reconstruir la economía italiana y a prepararla para el futuro», ha destacado Von der Leyen en un comunicado. Una vez sea aprobado en julio por los ministros de Finanzas de la UE (Ecofin), Italia recibirá un anticipo de 24.900 millones, el mayor de todos los que se desembolsarán antes del parón de verano.
Por su parte, Alemania únicamente ha solicitado a Bruselas la parte de subvenciones no reembolsables y espera recibir 25.600 millones de euros en este tipo de ayudas durante los próximos cinco años. El anticipo que recibirá Berlín una vez el plan sea aprobado de forma definitiva ascenderá a 2.300 millones.
«El plan contiene medidas esenciales que ayudarán a Alemania a emerger de la crisis de la COVID-19 más fuerte. Las reformas e inversiones contribuirán a la digitalización y descarbonización de la economía alemana de forma que esté mejor preparada para el futuro», ha destacado Von der Leyen.
Con los tres planes nacionales aprobados este martes son ya diez los que han recibido el visto bueno del Ejecutivo comunitario. Este mismo lunes, Bruselas aprobó las reformas e inversiones planteadas por Austria y Eslovaquia y la semana pasada superaron el examen Portugal, España, Grecia, Dinamarca y Luxemburgo.
Está previsto que la Comisión Europea dé luz verde este miércoles a los planes nacionales de Bélgica y Francia para completar así la aprobación de las primeras doce estrategias de recuperación que fueron enviadas las autoridades comunitarias antes del 30 de abril.