La vieja planta de Cruzcampo en Sevilla renace como centro de cultura cervecera y talento

Por Redacción

La antigua planta de Cruzcampo, ubicada en la avenida de Andalucía de Sevilla capital y donde en 1904 comenzó la fabricación de cerveza de dicha marca, ha acogido este viernes el acto oficial de inauguración de dichas instalaciones como nuevo centro de innovación relacionado con la cultura de la cerveza, gracias a un proyecto de rehabilitación y adaptación con el que «la vieja fábrica renace» para recuperar su papel «referente» en la capital andaluza, de la mano de una empresa precisamente «asociada a la marca de ciudad» de Sevilla.

El acto de inauguración de la nueva «Factoría Cruzcampo», que abrirá sus puertas al público el martes 1 de junio, ha contado con la participación de la vicepresidenta del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Carmen Calvo; la consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz; el alcalde de Sevilla, Juan Espadas; el presidente de Heineken España, Guillaume Duverdier; y Carmen Ponce, vicepresidenta de la Fundación Cruzcampo y directora de Relaciones Corporativas de
Heineken España, entre otras autoridades.

La Factoría Cruzcampo, promovida por el grupo Heineken sobre la antigua planta cervecera de la avenida de Andalucía, ha supuesto la restauración de tales instalaciones, relevadas desde 2007 por el actual centro de producción de Heineken en Sevilla, mediante una inversión de aproximadamente seis millones de euros para conformar un espacio destinado a la fabricación de cerveza artesanas, la formación y el desarrollo profesional de los jóvenes participantes en el programa de formación hostelera Talento Cruzcampo y el apoyo a la empleabilidad de los mismos mediante la recaudación cosechada con las consumiciones.

En este nuevo espacio, estrenado con el tiraje de una cerveza inaugural elaborada con miel de azahar y naranja y bautizada como ‘La Descartá’, el público podrá ver y conocer todo el proceso de elaboración de la cerveza, además de disfrutar de experiencias cerveceras como catas a ciegas o la degustación con maridajes, entre otros aspectos, destinados a la promoción de la «cultura cervecera».

LA «ESENCIA» DE CRUZCAMPO

El centro, de unos 1.300 metros cuadrados y remozado con un diseño que conserva la «esencia» de la planta original de Cruzcampo, cuenta con capacidad de elaboración de unas 400.000 cañas al año de hasta siete variedades diferentes al mismo tiempo, ofreciendo una carta de hasta 30 recetas de cervezas a lo largo de todo el año.

Después de que la pandemia de coronavirus Covid-19 irrumpiese justo a dos meses de la finalización de este proyecto, Guillaume Duverdier ha expuesto que tras un año «especialmente difícil» a cuenta del virus, Cruzcampo y su Fundación han volcado todos sus «recursos, pasión y experiencia» para la puesta en marcha de este centro destinado a incentivar «el talento de las nuevas generaciones y apoyar la transformación de la hostelería», un sector que como ha recordado constituye un «motor» económico.

En ese sentido, ha recordado que la pandemia ha desencadenado un escenario «difícil» no solo para Heineken, sino también para sus «clientes», en alusión a los bares, restaurantes y todo tipo de negocios del sector hostelero, especialmente afectado por las restricciones implantadas para detener la propagación del Covid-19.

LOS JÓVENES TALENTOS

En ese sentido, ha defendido reiteradamente el «compromiso social» de Heineken para con el «futuro» de los jóvenes que buscan un porvenir en el sector de la hostelería, pues la recaudación de la Factoría Cruzcampo será dedicada a la empleabilidad de los miembros del programa de formación hostelera Talento Cruzcampo. En concreto, por cada euro aportado por el visitante en 2021, la Fundación Cruzcampo destinará «diez» para más formación para el empleo de jóvenes talentos en la hostelería.

«Elaboramos cervezas que le gusten al mundo, a las personas y al
planeta», ha manifestado el presidente de Heineken España, celebrando la apertura de este nuevo centro.

La consejera Rocío Ruiz, de su lado, ha señalado que la cerveza es un producto insertado en el ADN de Andalucía», destacando la apertura de la Factoría Cruzcampo como prueba de la «apuesta» de Heineken por Sevilla y por Andalucía. Esta apertura, en su opinión, constituye el «renacer la vieja fábrica de Cruzcampo, todo un símbolo y referente para la vida sevillana», como espacio «dinamizador» para el barrio de Nervión y el conjunto de la ciudad.

«QUE VUELVA LA ALEGRÍA»

«Es un éxito saber reinventarse sin olvidar la esencia. No podemos olvidar nuestros orígenes y necesitamos que vuelva la alegría», ha dicho la consejera, encuadrando esta apertura en la tan necesaria y ansiada «recuperación» de la normalidad y la actividad.

Juan Espadas, de su lado, ha agradecido la «apuesta» de Heineken y Cruzcampo por Sevilla con este «proyecto emblemático» que remarca la «cultura cervecera» de la que Sevilla «hace gala». Al hilo, ha enfatizado que Cruzcampo es una empresa «asociada a la marca de ciudad» de Sevilla, algo de lo que ha mostrado su «orgullo».

Esta apertura, según ha expuesto el alcalde, refleja además «la recuperación del estado de ánimo de la ciudad, de la hostelería y del turismo». Finalmente, ha llamado a «completar» la restauración y puesta en servicio de las antiguas instalaciones de Cruzcampo, en alusión al edificio del recinto popularmente conocido como el «palomar», destinado a acoger un centro de exposiciones, eventos culturales, formativos y divulgativos y encuentros de trabajo.

MUESTRA DE «MODERNIDAD»

La ministra Carmen Calvo, quien ha confesado que no bebe cerveza, pero sí «comparte» siempre los momentos asociados a su consumo, ha aplaudido igualmente la apertura. «Este es un lugar de mestizaje, cultura. Es momento del atrevimiento controlado para saber quiénes somos. La modernidad es estar seguros con nuestra identidad y tranquilos con nuestro pasado», ha manifestado, considerando que Andalucía refleja un buen «equilibrio» entre «modernidad» y tradición.

Carmen Ponce, de su lado, ha expuesto que la Factoría Cruzcampo de Sevilla «supone un refuerzo del compromiso» de Heineken «con la sociedad y con Andalucía», donde la misma cuenta con el 40% de su plantilla y genera unos «25.000 empleos indirectos e inducidos», gracias a sus dos fábricas de Sevilla y Jaén y el centro de innovación cervecera, la Fábrica Cruzcampo de Málaga, a la que se suma ahora este centro de la capital andaluza.