Comunidad educativa en la prevención de la violencia y el acoso escolar

Por Remitido

Un estudio reciente a cargo de la Organización de las Naciones Unidas reveló que uno de cada tres chicos sufre acoso escolar, también conocido bullying. Se trata de una realidad cada vez más presente en la vida de muchos niños, quienes generalmente empiezan a ser víctimas de este tipo de comportamientos por parte de otro compañero desde los primeros cursos de primaria.

Por tal motivo, es imprescindible aplicar medidas tempranas que contribuyan a disminuir el impacto emocional y psicológico que genera este tipo de violencia tan común en las escuelas. La comunidad educativa juega un rol fundamental en proyectos innovadores como el Programa TEI, el cual se basa en la tutorización de un alumno mayor sobre otros dos años menor y se ha convertido en el proyecto de convivencia mayor implementado en el país y uno de los primeros a nivel mundial.

Un plan de acción que sí funciona

La premisa del Programa TEI es mejorar la integración escolar mediante la contención entre alumnos, con el fin de lograr conductas saludables dentro y fuera de las aulas para evitar el acoso en cualquiera de sus formas y detectar todo tipo de comportamientos violentos de raíz. Además, está diseñado para todas las etapas educativas desde Infantil, Primaria, Secundaria hasta Ciclos Formativos.

La idea que concibió Andrés González Bellido se comenzó a implementar a finales del siglo XX, actualmente cuenta con el respaldo de más de 2.000 centros educativos y ya le cambió la vida a más de 3.000.000 de alumnos. Es el programa de mayor implementación en España y uno de los primeros a nivel mundial porque presenta evidencias científicas de sus resultados, con una reducción muy significativa de la violencia física, verbal y hasta virtual en ambos casos, es decir, en víctimas y agresores, así como para advertir síntomas de ansiedad o depresión.

Prevención ante todo

El éxito de este programa depende sobre todo de la comunión y el apoyo de toda la comunidad educativa en general. Alumnos, familiares y docentes deben trabajar en conjunto tanto para guiar a los tutores como para acompañar a los más pequeños. Además, cada proyecto también se realiza con la colaboración del ayuntamiento local y su correspondiente departamento educativo.

La implementación del programa es progresiva. El alumno de 1º y 2º curso comienza a desarrollar competencias emocionales y valores a través de actividades específicas. Posteriormente, el de 3º grado es tutorizado por estudiantes de 5º y así se mantiene el año siguiente, donde el alumno de 4º recibe la asistencia del estudiante de 6º. El proceso se repite en Secundaria y Ciclos Formativos.

Claro que en realidad la clave del Programa TEI radica en el apoyo de toda la comunidad educativa en general, no solo de alumnos y maestros sino también del personal no docente, familiares y amigos. Es la única manera de generar un ambiente sano y libre de violencia.