Casa Decor abre sus puertas con la lección aprendida y el firme propósito de adaptar las propuestas de arquitectos e interioristas a un hogar multifuncional, sostenible y cálido en el que poder disfrutar gracias a los materiales y la tecnología, incluso del campo en medio de la ciudad.
La Casa de Tomas Allende, en pleno centro de Madrid, es el lugar elegido para contemplar 64 cuatro espacios decorados, en un edificio que en sí mismo es un deleite por su entrada protegida, preciosas vidrieras en sus escaleras, las escayolas de sus techos, la forja de sus balcones y el maravilloso torreón decorado con cerámicas del taller de Daniel Zuloaga.
Alicia García Cabrera, directora de Casa Decor, ha señalado este miércoles que, en esta edición, «cristalizan tendencias que muestran un estilo de vivir», en el que están muy presente las necesidades que se han planteado en el hogar durante los últimos meses.
Y se refleja en espacios multidisciplinares, con tonos cálidos, donde la sostenibilidad prima en la elección de los materiales, algo que pone de manifiesto la importancia «que hemos dado al hogar durante el confinamiento».
Las obras de arte se integran en los espacios de una manera serena como propone Laura Garna, decorando la entrada del edificio inspirándose en el cuadro «El Jardín de las delicias» de El Bosco, que se complementa con esculturas de resina y obras de arte de Fernando de Ana.
Los artesanos y el arte tienen un espacio destacado en esta edición, donde resalta el espacio de Castilla-La Mancha con una pared de azulejos que refleja la imagen de Don Quijote y Sancho Panza y una exposición de catorce artistas mexicanos.
Nada más llegar a la primera planta, Virginia Gasch propone «un brindis a la cercanía» con una oda al beso en un espacio en el que el sofá son unos labios, las esculturas remarcan también la boca y la lámpara también resalta en su diseño esa parte del rostro.
El brillo no siempre tiene que ver con el lujo, en decoración a veces aparece en forma de microcemento, como en el espacio que propone María Querencia, que apuesta por un ambiente «natural, un refugio de paz» con materiales sensitivos, como una mesa de piedra caliza, y textiles de fibras naturales para crear un espacio íntimo.
En la misma línea, con elementos naturales como bandera, Mónica Garrido, crea para La Redoutte un «espacio versátil» donde toda la familia se puede sentir cómoda y en el que está presente un rincón de lectura, una mesa de comedor, una librería, donde unas amplias ventanas acogen plantas de jardín, «una manera de meter el campo en la ciudad» y crear una vista agradable.
Crear un pequeño refugio es lo que ha conseguido Guille García Hoz con su oasis particular, en la misma línea que el espacio de Lorna de Santos que busca el «contacto con el origen y la naturaleza».
Elementos naturales que no faltan en la cocina de Rosa Urbano para Sixty Pro en la que mezcla piedra y madera con muebles en un blanco roto «para fomentar la tranquilidad» y donde la iluminación es fundamental. Mientras que Paula Rosales opta por una cocina también sostenible, con materiales que se pueden reutilizar y desmontar, según las necesidades.
Con la intención de hacer de nuestra casa un espacio para el ocio Bang & Olufsen propone dispositivos envolventes con los que expandir el sonido de una zona otra, altavoces que pasan desapercibidos al tomar forma de libro o ayudan a tapar la televisión para retirarse en forma de vuelo de mariposa cuando se quiere ver.
La firma centenaria de material eléctrico Simon apuesta por un espacio experimental en forma de cueva confeccionada con tricotaje en 3D, que repele el agua, al que incorpora luces led y drones de interior, «una nueva manera de habitar adoptando formas de sostenibilidad», explica a Efe Stephanie Chaltie.
En esta edición se estrena el interiorista jienense Alberto Aranda, en la que se adentra en su mundo interior para crear un espacio de juegos al que un «adulto no quiere renunciar».
La firma Louis Vuitton también se incorpora por primera vez con la presentación de cinco propuestas de su serie Objetos Nómadas y recibe en su espacio con la sillón Bulbo, creado por los brasileños hermanos Campana.
Como novedad este año desembarca en Casa Decor la plataforma Netflix con una de sus series, «Valeria», con un decorado para la ocasión que replica espacio donde escribe su novela la protagonista.
El viaje decorativo termina en la azotea del edificio donde Ana Robles ha creado un espacio con LDK Garden con un concepto claro: «De Madrid al cielo», un lugar donde disfrutar de unas piezas que se funden con el espacio con unas maravillosas vistas.
Casa Decor permanecerá abierta en el edificio de la Plaza de Canalejas hasta el próximo 27 de junio y mantiene su servicio de restaurante a cargo de Ramón Freixa.