La Fundació Bofill, Fundación Secretariado Gitano y Save the Children, bajo la Presidencia española del Consejo de la UE, han presentado un documento de recomendaciones que insta a la Unión Europea a dotarse de mecanismos concretos para luchar contra la segregación escolar.
Las recomendaciones, respaldadas por el Ministerio de Educación y Formación Profesional de España, reclaman a la Comisión Europea y los Estados miembros el desarrollo urgente de una línea de trabajo específica de lucha contra la segregación escolar.
Las propuestas se presentaron en el marco del evento ‘Políticas de desegregación en la Unión Europea: un camino hacia el Éxito Escolar’, celebrado en Bruselas, que ha reunido a expertos, líderes políticos y representantes del tercer sector en una voluntad conjunta para erradicar la segregación en las aulas europeas y escalar experiencias exitosas a nivel estatal.
Las entidades reclaman a la Comisión Europea y a los Estados miembros la implementación urgente de una batería de medidas para cumplir el compromiso de desarrollar «estrategias integradas y globales para el éxito escolar» de aquí a 2025.
Entre las propuestas a las instituciones europeas, destacan priorizar el reto de la segregación escolar dentro la agenda europea; prestar atención específica al objetivo de reducir la segregación escolar dentro de las estrategias hacia el éxito escolar en el marco de la agenda del Espacio europeo de Educación; construir indicadores comunes y dar seguimiento a la segregación escolar en los Estados desde las instituciones europeas; o desarrollar indicadores que permitan comparar la segregación en los territorios europeos e incorporarlos a los mecanismos de seguimiento de las acciones educativas.
Asimismo, recomiendan a la Comisión desarrollar informes e investigaciones específicas sobre las políticas nacionales; elaborar directrices sobre políticas de desegregación a nivel europeo, priorizar la investigación en este ámbito y generar espacios de aprendizaje entre pares; o apoyar a los Estados en la elaboración de planes y políticas, y generar recursos y espacios para compartir enfoques eficaces en la lucha contra la segregación escolar.
También reclama promover el desarrollo de medidas en el marco de los Fondos de Política de Cohesión de la UE; e incentivar la implicación de los Estados miembros programando objetivos específicos de educación en los Fondos de Política de Cohesión de la UE 2021-2027, tanto en la programación de los objetivos específicos de educación como en la posible reprogramación de fondos, así como a través de otros programas e iniciativas relevantes de la UE.
PROPUESTAS PARA LOS ESTADOS MIEMBROS
El documento también pide a los Estados miembros que impulsen avances normativos que posibiliten la implementación de medidas específicas contra la segregación escolar; diagnosticar y monitorizar la segregación escolar con indicadores comunes; promover coaliciones, acuerdos sociales y campañas en favor de la lucha contra la segregación escolar; y aprovechar los fondos europeos para adoptar medidas que reduzcan la segregación escolar.
Diferentes organismos internacionales como la OCDE o la UNESCO alertan desde hace años de los graves riesgos de la segregación escolar sobre la eficiencia y la calidad de la educación.
En este sentido, las entidades sociales advierten de que «la inacción política permite que los sistemas educativos europeos concentren el alumnado más vulnerable -entre otros, de la comunidad gitana y con origen migrante- en determinados centros, perjudicando profundamente sus oportunidades educativas».
Las organizaciones recuerdan que numerosas investigaciones demuestran que el alumnado que estudia en escuelas segregadas «tiene peores resultados, mayor riesgo de abandono escolar y efectos negativos a lo largo de toda su trayectoria vital». Asimismo, concluyen que la falta de diversidad social en la escuela «dificulta la convivencia en las sociedades dado que el alumnado pierde oportunidades de interacción e intercambio con alumnado con otros orígenes sociales».
«Difícilmente crearemos sociedades cohesionadas, en las cuales distintos grupos sociales tengan intereses compartidos y construyan proyectos en común, si apenas existe diversidad social en el principal espacio de socialización y aprendizaje de la infancia. La escuela no debería ser un lugar donde las brechas sociales se aprenden y refuerzan, sino un espacio donde se tienden puentes entre distintos grupos sociales», zanjan las entidades.