La agencia de calificación S&P ha subido un escalón la puntuación del fabricante español de componentes para vehículos Grupo Antolin, pasando de ‘B-‘ a ‘B’ (grado de especulación), gracias a su «resiliente» flujo de caja y a sus buenas perspectivas de reducción de deuda.
Tal como ha indicado la compañía, Grupo Antolin registró un flujo de caja libre de más de 125 millones de euros en 2020, más de lo esperado por la agencia de calificación en sus previsiones. Además, la empresa modificó los plazos de sus préstamos principales, por lo que aumentó su margen de maniobra.
«Esperamos que la recuperación de la industria respalde un crecimiento de los ingresos de entre el 9% y el 11% en 2021, y de entre el 7% y el 9% en 2022, lo que, combinado con una disciplina de costes, hará que el apalancamiento del grupo mejore», ha subrayado S&P.
Por ello, la nota de Grupo Antolin pasó de ‘B-‘ a ‘B’, con perspectiva ‘estable’, que indica que la empresa mejorará su deuda.
«Grupo Antolin demostró una buena gestión de costes y de caja en 2020, lo que indica la resistencia de los márgenes los flujos de caja las condiciones más débiles del mercado», ha añadido la agencia de calificación.
El fabricante de componentes para vehículos Grupo Antolin registró unas pérdidas netas de 143,9 millones de euros en 2020, en comparación con los 0,5 millones de euros que ganó en 2019, a pesar de que volvió a beneficios en el cuarto trimestre, cuando obtuvo unas ganancias de casi 23 millones, reduciendo sus pérdidas anuales.
Antolin facturó 3.975 millones de euros en todo el 2020, lo que supone un 23,7% menos que los 5.214 millones que ingresó en el año precedente. Además, el resultado bruto de explotación (Ebitda) se redujo un 37%, hasta los 272 millones de euros.