El fabricante japonés de automóviles, motocicletas y motores Honda contabilizó un beneficio neto de 363.069 millones de yenes (2.307,7 millones de euros) en su primer trimestre fiscal, lo que supone un incremento de más del doble (+143,3%) en la comparativa interanual.
Entre abril y junio, la marca japonesa facturó 4,6 billones de yenes (29.226 millones de euros), cifra un 21% superior a la registrada en el mismo periodo del año anterior.
Así, las ventas mundiales de vehículos fueron de 3,03 billones de yenes (19.251,2 millones de euros), mientras que el segmento de las motocicletas facturó 756.955 millones de yenes (4.809,4 millones de euros).
Por su parte, el beneficio operativo de la empresa se situó en los 394.447 millones de yenes (2.506,1 millones de euros), un 77,5% más, mientras que su beneficio antes de impuestos fue de 514.924 millones de yenes (3.271,4 millones de euros), más del doble (+116,9%) que en su primer trimestre fiscal de 2022.
De cara este año fiscal, Honda mantiene las previsiones que comunicó a cierre del ejercicio comprendido entre abril de 2022 y marzo de 2023, de modo que espera obtener un beneficio neto de 800.000 millones de yenes (5.082,7 millones de euros), lo que supondría un aumento del 15,1%, y una facturación de 18,2 billones de yenes (115.631,1 millones de euros), un 7,6% más.