El cónsul de Ucrania en San Petersburgo, Alexander Sosoniuk, se encuentra ya en libertad tras haberse pasado varias horas retenido por el Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) bajo el cargo de haber recibido información «secreta» sobre intereses logísticos de esta agencia de seguridad.
La puesta en libertad de Sosoniuk ha sido confirmada por el portavoz del Ministerio de Exteriores ucraniano, Oleg Nikolenko, a la agencia RBK-Ukrania.
«Otra provocación en el contexto de las acciones desestabilizadoras de Rusia. Los agentes de la ley rusos detuvieron a un empleado del Consulado General de Ucrania en San Petersburgo durante varias horas. Ahora se encuentra en la sede diplomática ucraniana», según sus comentarios, recogidos a su vez por la agencia oficial rusa Sputnik.
El FSB había anunciado horas antes que el cónsul había sido detenido por recibir información clasificada sobre las bases de datos precisamente de esta agencia de seguridad de manos de un «ciudadano ruso». El cónsul fue detenido durante el mismo encuentro, ocurrido el viernes.
Para el FSB, la actividad del detenido «es incompatible con el estatus de un funcionario diplomático y tiene un claro carácter hostil hacia la Federación de Rusia», y anuncia que tomará «todas las medidas necesarias de acuerdo con el derecho internacional», de acuerdo con el comunicado, recogido por Sputnik.
Ucrania no ha corroborado esta versión y se ha limitado a informar que el caso está siendo investigado. No obstante, la primera respuesta ucraniana al incidente no se hizo esperar y ha llegado por boca del viceministro de Exteriores ucraniano, Eugueni Enin, quien ha prometido una respuesta «recíproca» contra lo que calificó como una nueva maniobra de acoso del Gobierno ruso.
«De acuerdo con la práctica existente y sobre la base del principio de reciprocidad, la parte ucraniana está preparando una respuesta con respecto a los diplomáticos rusos», ha declarado Enin a la agencia UNN, donde calificó lo ocurrido de «otra provocación» contra Ucrania.
El de este sábado es un nuevo episodio en el largo conflicto que enfrenta a ambos países desde 2014 en Crimea y en el este de Ucrania.
En el caso de Crimea, Rusia se anexionó este territorio durante el conflicto de 2014 con Ucrania antes de que la población decidiera su incorporación en un referéndum mientras que la región de Donbás vive desde hace años un conflicto armado que enfrenta a las tropas del Gobierno ucraniano y a los separatistas prorrusos.
Los Acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política al conflicto, pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia. Las hostilidades han dejado hasta la fecha al menos 13.000 muertos, según estimaciones de la ONU.
MANIOBRAS MILITARES
También en las últimas horas se ha sabido que Rusia ha desplegado al menos 15 buques de guerra en el Mar Negro, a través del estrecho de Kerch, en la península de Crimea, para realizar una maniobra militar, según ha informado la agencia de noticias Interfax.
Esta maniobra tiene lugar después de que Estados Unidos cancelara previamente el despliegue de dos buques de guerra en el Mar Negro tras las quejas de Rusia, según fuentes turcas.
El viernes, el Ministerio de Defensa ruso declaró que ciertas áreas marítimas en Crimea permanecerían cerradas durante meses debido a las maniobras.