Debido a que es el día internacional de la mujer, el 8 de marzo es reconocido en todo el mundo.
Se trata de una fecha que cada vez cobra mayor importancia, por ser el día en que personas de alrededor del planeta unen fuerzas para poner en el punto de mira el papel de las mujeres en la sociedad, desde un punto de vista político, económico, social y cultural.
A lo largo de la historia, las mujeres se han alzado para hacerse oír y para reclamar sus derechos en medio de una sociedad históricamente patriarcal. A pesar de tener como referencia esta fecha, dicha lucha se ve reflejada en cada paso que dan las mujeres, tanto de forma individual como colectiva, en su día a día.
La desigualdad de género está presente en muchos aspectos de la sociedad, sin embargo, cuando de cargos directivos o emprendeduría se trata, la brecha se hace aún más amplia. Según informa la Organización Internacional del Trabajador (OIT), la presencia de mujeres en cargos directivos está aumentando de forma notable, puesto que esta es cada vez mayor. No obstante, aún queda mucho camino por recorrer.
La participación femenina en cargos directivos es un 30 % menor que en el caso de los hombres, lo cual muestra la situación de desigualdad en el acceso a puestos de responsabilidad. Asimismo, dependiendo del sector en el que se especialice la empresa, el porcentaje puede incluso disminuir, como es, por ejemplo, el caso de las empresas de capital de riesgo. Tan solo el 5,6% de compañías de este sector en Estados Unidos están lideradas por mujeres.
Son muchos los desafíos a los que tiene que enfrentarse una mujer en el mundo de los negocios, los cuales están relacionados con obstáculos legales y políticos para la propiedad y desarrollo de la empresa, el acceso limitado a capital o la conciliación de la vida profesional y familiar.
Afortunadamente, y a pesar de estos datos un tanto alarmantes, un reciente artículo de Forbes destaca que, por ejemplo, los fondos de capital de riesgo liderados por mujeres se han cuadriplicado en los últimos 5 años. Y, al igual que en este ámbito, otros ejemplos han mostrado el valor añadido de contar con mujeres al frente de los negocios.
En un mundo liderado por hombres, es importante prestar especial atención a los logros femeninos que recoge la historia: ponerles cara, ojos y, sobre todo voz, y tomar así referentes para el empoderamiento femenino.
Siguiendo con el sector del capital de riesgo, Nicole Junkermann es un nombre cada vez más conocido en dicho ámbito. Tras años de estudio y de experiencia, esta empresaria, inversora y filántropa ha apostado por startups y empresas tecnológicas en fase inicial, convirtiéndose así en un actor en el mundo del capital de riesgo.
Carol Tomé es otro ejemplo de perseverancia y éxito. La consejera delegada de United Parcel Service, empresa estadounidense de transporte, ha figurado dos veces en la lista de las 100 mujeres más poderosas del mundo. Asimismo, gracias a su puesto directivo, ha conseguido establecer importantes modificaciones en las políticas del lugar de trabajo. Tal y como ella afirma “si trabajas para nosotros, queremos que puedas llevar tu auténtico yo en el trabajo”.
En esta misma línea, pero trasladándose al sector de la tecnología, Randi Zuckerberg y Sherly Sandberg se han establecido como dos figuras destacadas en la lucha del papel de la mujer en la tecnología. La primera de ellas, por su parte, tiene como objetivo que más mujeres entren en el mundo de la tecnología, el cual está claramente dominado por hombres. “Siempre ha sido mi pasión inspirar y apoyar a mujeres en la tecnología, la inversión y el liderazgo”, afirma Zuckerberg.
Contar con referentes de mujeres de negocios resulta una arma indispensable para el crecimiento individual y colectivo, por lo que tanto en el día internacional de las mujeres, como a lo largo del año, hay que considerarlos y aprender de ellos para que el futuro sea próspero y sin desigualdad.
