Las monedas digitales en las que están trabajando algunos bancos centrales serían «kryptonita» para el bitcoin, según explican los analistas de Bank of America en un informe, aunque las finanzas descentralizadas son el mayor desafío al sistema financiero que los analistas han identificado.
«Creemos que es probable que difieran tecnológicamente de las criptomonedas y están en parte motivadas por el deseo de los bancos centrales de defender su territorio de las criptomonedas y activos similares», defienden los autores del estudio.
El Banco Central Europeo (BCE) está actualmente revisando las respuestas a una consulta sobre esta posibilidad y anunciará su decisión de crear una moneda digital o no a mediados de este año. Bank of America cree que lo más probable es que la cree, aunque dependerá de la «experiencia del ensayo y otros desarrollos macroeconómicos».
El Banco Popular de China ya ha desarrollado la moneda, que está en periodo de prueba, mientras que la Reserva Federal estadounidense (Fed) nunca se ha mostrado muy entusiasta sobre la idea.
La ventaja de este tipo de dinero frente al bitcoin es que, al estar respaldado por una divisa y una institución, no experimenta la volatilidad en el precio que sí afecta al bitcoin y otras criptomonedas.
ETHEREUM, ¿MÁS DISRUPTIVO QUE BITCOIN?
Si bien el bitcoin es la criptomoneda más conocida, el ethereum cuenta con otras propiedades distintas. Las finanzas descentralizadas (DeFi) se desarrollan con base en este otro criptoactivo y según Bank of America, se trata del mayor desafío a las finanzas modernas que han identificado».
«Al igual que bitcoin busca sustituir a una autoridad emisora centralizada que dota a la moneda de su propia confianza, las DeFi pretenden sustituir una serie de instituciones centralizadas y reguladas por sistemas descentralizados, normalmente basados en la cadena de bloques de ethereum», explica el informe.
Esta tecnología es la que permite que se efectúen automáticamente los contratos. Por ejemplo, si un avión se retrasa y se ha establecido con el seguro un tiempo determinado, al pasar este se abonaría automáticamente a la cuenta del turista la cantidad pactada.
UN ACTIVO POCO SOSTENIBLE
Bank of America considera que la dimensión medioambiental del bitcoin es pobre, dado que la red emite en torno a 60 millones de toneladas de CO2, lo mismo que Grecia. Este es un problema que afecta también a otras criptomonedas, como ethereum, cuya emisión se sitúa en las 9,5 millones de toneladas de CO2.
La Universidad de Cambridge cuenta con un índice denominado Cambridge Bitcoin Electricity Consumption Index que mide la electricidad que consume la criptomoneda y la compara con países: la red ya supera el consumo anual de Argentina o de Países Bajos.
En cuanto a las dimensiones sociales y de buena gobernanza, la calificación del bitcoin mejora hasta un nivel medio, ya que la entidad considera que es positivo que se democratice el dinero y se garantice la anonimidad de su propiedad.
No obstante, el informe señala que el 95% de los bitcoin en circulación está en manos del 2,4% de las cuentas. «Desde nuestro punto de vista, el hecho de que un porcentaje tan pequeño de cuentas maneje esa cantidad de bitcoin hace que sea un instrumento poco práctico como medio de pago o como vehículo de inversión», sostienen los autores del estudio.
Es complicado saber quiénes son los propietarios de esas cuentas, aunque se ha publicado recientemente que aproximadamente el 20% de bitcoin en circulación se ha perdido debido a que sus propietarios han perdido la contraseña.