Lo bueno no siempre es caro, vivir la experiencia El Cacereño

Por Remitido

Los embutidos ibéricos son uno de los alimentos más representativos y valorados de la gastronomía española en el mundo. Sin embargo, la calidad y pureza no siempre están en la proximidad del comercio y, en ese sentido, algunas marcas y establecimientos se han reinventado para tener disponible un stock con todas las características propias de la Península.

En este contexto, El Cacereño es una de las tiendas de jamones y embutidos ibéricos de mayor acogida, debido a la constante adhesión a la cultura centenaria que hay detrás, conservando la esencia del sabor y preparación, pero buscando propuestas accesibles con las presentaciones gourmet.

La compañía no solo desarrolla las ventas en e-commerce, sino que dispone de una tienda de jamonería, quesería y colmado, con un servicio de degustación particular de jamones y embutidos de diferentes formatos, para satisfacer las necesidades de todos los comensales.

Productos de primera calidad

El Cacereño lleva a cabo la distribución de una serie de embutidos ibéricos. Por ejemplo, los embutidos loncheados, con presentaciones de panceta salada, vela ibérica de salchichón y chorizo, jamón cebo de campo y paleta de bellota. Estos pesan muy poco y ahorran el montaje del tradicional kit de corte. 

Igualmente, están a la venta los jamones de brida negra, roja y verde, que provienen de cerdos alimentados con bellotas y hierbas naturales.

Asimismo, las paletas, también de brida con esas mismas gamas de colores, poseen empaquetados fáciles de manejar, con texturas homogéneas y poco fibrosas.

Todos los productos se pueden encontrar en canales de punto de venta de más de 500 negocios de proximidad, como supermercados, vinotecas, fruterías, carnicerías, tiendas gourmet y pescaderías en Barcelona, Tarragona, Girona y Lleida. Por supuesto, los usuarios pueden hacer las compras a través de la tienda online, con todas las facilidades de pagos y envíos.

Selección de algunas de las mejores razas

El CEO de El Cacereño, Raúl Delgado, tiene la filosofía de elegir los mejores ibéricos del país, para realizar una detallada trazabilidad en la calidad, con la alimentación del cerdo al tiempo que pasa por la dehesa, el tratamiento y manipulación posterior.

Detrás de la preparación y empaquetado al vacío, bajo el cumplimiento de todas las normas de salubridad, están los maestros jamoneros experimentados, ganaderos y secaderos de máxima calidad.

Dentro de los objetivos recientes del empresario, está franquiciar el modelo para ofrecer opciones a emprendedores y startups en la comercialización, conservando los olores y sabores propios, y ampliando el target a las nuevas generaciones.