El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha defendido una mejora en las relaciones entre España y Marruecos basada en el diálogo político reforzado y el respeto mutuo: «Lo que cuentan son los resultados. Estamos mejor».
Lo ha defendido así en una entrevista en el diario ‘La Vanguardia’ recogida por Europa Press este domingo, tras la reciente cumbre entre ambos países en Rabat, con doce ministros del Gobierno de Pedro Sánchez y sin el rey Mohamed VI.
Al ser preguntado textualmente si una reunión de alto nivel con Marruecos sin la presencia del rey Mohamed VI es una buena cumbre, ha respondido que «nunca ha habido tantos ministros españoles y marroquíes a ambos lados de la mesa», destacando que reunió a 28 ministros en total.
Ha asegurado que el rey de Marruecos «se ha implicado personalmente en la preparación de la reunión» y que, según él, Pedro Sánchez, es probablemente el jefe de Gobierno español en democracia que más veces ha visto al rey de Marruecos.
También ha destacado que Sánchez ha recibido en Rabat una invitación para un futuro encuentro con Mohamed VI para el que aún no hay fecha fijada, y que «según el comunicado de la Casa Real será pronto».
Para él, la situación entre ambos países ha mejorado porque las relaciones comerciales también lo han hecho, porque han aumentado las posibilidades de inversión en el ámbito ferroviario, en el ciclo del agua, en el saneamiento y en el sector agroalimentario y porque la «presencia de la enseñanza del español en las escuelas marroquíes» también es mayor, entre otros motivos.
Por otro lado, ha detallado que se ha pactado un calendario que se desplegará de manera gradual para poner en marcha las aduanas de Ceuta y Melilla: «No queremos avalanchas, no queremos volver a vivir escenas indignas para la relación entre los dos países».
Preguntado por el Sáhara Occidental, ha respondido que «la solución no la va a imponer España», sino que la propondrá el enviado personal del secretario general de las Naciones Unidas, Staffan de Mistura, al que ha definido como un gran diplomático que cuenta con el apoyo del Gobierno.
Y al preguntársele por si hay competición entre Italia y España por la energía en Europa, ha remarcado que «España es parte de la solución para que Europa no vuelva a estar sometida a un chantaje energético, venga de donde venga», y ha destacado la importante capacidad de regasificación de gas natural licuado de España, refiriéndose a la planta de Barcelona como ejemplar y vital para Europa.
Sobre la guerra en Ucrania, Alabres ha avisado de que puede ser larga porque el presidente ruso, Vladimir Putin, «ha dejado claro que no quiere dar ninguna oportunidad a la paz», ante lo que Europa mantendrá su firme propósito de seguir ayudando a Ucrania, ha dicho.
