Aunque no existen cifras exactas sobre la cantidad de mujeres que conviven con diagnósticos como la hipertrofia mamaria o gigantomastia, los profesionales de la salud estiman que hay un amplio porcentaje de la población que padece esta patología y sus consecuencias en silencio. Un crecimiento excesivo de los pechos es responsable de un conjunto de trastornos que afectan a la calidad de vida de las mujeres.
La Unidad de Mama del Instituto de la Mujer de la Clínica Anatómica de León del Dr. Alzaga se ha especializado a lo largo de los años en enfocar las posibles soluciones desde los casos más moderados, mediante un tratamiento ortopédico con expertos en las prendas íntimas de la mujer, hasta una solución quirúrgica para los casos más invalidantes mediante una reducción de pecho.
Una de las consecuencias asociadas a la hipertrofia mamaria es el dolor crónico cervical y de columna. Debido al tamaño excesivo de los pechos, la espalda debe soportar una mayor cantidad de peso, afectando la postura e impactando negativamente en el área cervicotorácica. Estos problemas de volumen excesivo también aumentan el riesgo de irritación frecuente en la piel del surco submamario, lo que ocasiona molestias y ardor que con el tiempo pueden desencadenar patologías infecciosas de tipo fúngico.
En casos más moderados, la cirugía puede ser evitada utilizando sujetadores de tipo ortopédico que ayuden a sostener los pechos y alivien la presión sobre la espalda. Para casos más graves es necesaria ya una intervención quirúrgica de reducción de pecho en la que se pueda modificar su volumen y reducir su peso. Esta cirugía se realiza mediante ingreso hospitalario y anestesia general, procediendo a extirpar los tejidos sobrantes mediante una técnica quirúrgica cada vez menos agresiva y de una duración aproximada de una hora, con una más pronta recuperación y con menores molestias. Eso sí, la duración concreta en cada caso dependerá de las características del paciente y puede prolongarse durante más tiempo si sus circunstancias así lo exigen.
La Clínica Anatómica del Dr. Alzaga, con su director y fundador, el Dr. Francisco de Asís Alzaga, a la cabeza, ha perfeccionado su procedimiento de reducción mamaria durante más de 30 años, implementando técnicas que limitan las cicatrices a las zonas periareolares y verticales hasta el surco submamario. Gracias a esto, la técnica se ha reducido en su agresividad y permite una mejor recuperación.
Las interesadas en tratar sus casos de hipertrofia mamaria o gigantomastia solo deben ingresar a la página web de la Clínica Anatómica del Dr. Alzaga o ponerse en contacto telefónico y solicitar una cita de valoración con los profesionales que forman parte de su Unidad Mamaria. Con este servicio, la clínica espera que cada vez más mujeres puedan tratar estas condiciones y alcancen un mayor bienestar, mejorando su salud y su autoestima.
