La nueva presidenta de la Cámara de Barcelona, Mònica Roca, ha defendido este lunes que su equipo no llegó al frente de la corporación de derecho público para politizarla, sino para trabajar por Cataluña desde un punto de vista empresarial: «No hemos venido a politizar la Cámara, hemos venido a trabajar para el país».
En su discurso de presentación de candidatura para presidir la entidad cameral, ha defendido que la candidatura Eines de País llegó a la entidad porque creen que Cataluña merece ser un Estado independiente y defenderlo en todas las instituciones.
Considera que España ha tratado a Cataluña «con injusticias, sin invertir lo suficiente, sin cuidar su lengua y su gente, e incluso condenando la libertad de expresión de sus artistas o poniendo en la cárcel a sus dirigentes».
La hasta ahora vicepresidenta primera de la entidad ha dicho que los 20 meses de presidencia de su antecesor, Joan Canadell –de su misma candidatura–, se han caracterizado por lucha, esfuerzo y pasión, y que los próximos dos años estarán marcados por el consenso, la perseverancia y la ilusión: «Perseveraré en la búsqueda del consenso».
«Os pido que, si alguna vez hay algún acto o alguna declaración que pueda tener una connotación política, porque, como hemos dicho, es difícil que nada esté limpio de política, os pido que, en defensa del tejido empresarial que defendemos de esta cámara, todos y cada uno de nosotros también estemos», ha añadido.
También se ha preguntado cuántas empresas se podrían haber salvado si Cataluña «no tuviera déficit fiscal»: ha sostenido que los 2.600 millones de euros que la Cámara reclama al Gobierno de los 11.000 millones anunciados para sectores afectados son muy inferiores a los 16.000 del citado déficit.
Roca se ha preguntado cómo puede ser que esto no se reclame contínuamente y ha subrayado que no reclamar este dinero es hacer política: «No pedir dinero, lo que pertenece a estas empresas y que habría evitado cierres de empresas, también es hacer política; política en contra de Cataluña».
«Imaginemos cuántas pymes podríamos ayudas con estos 16.000 ó 9.000 millones de euros, cuántas empresas podrían no haber caído porque las podríamos estar financiando mientras han estado afectadas por causas ajenas a ellas», ha señalado.
AYUDAS DIRECTAS
En este sentido, Roca ha defendido «compensar directamente» a todas las empresas solventes que han tenido que cerrar en beneficio de la salud pública, y ha subrayado que la cuestión es determinar cómo se hace y cómo se compensa.
«No hemos dejado de reclamar a gobiernos ayudas directas y flexibilización de las medidas mediante el uso de la tecnología», ha añadido.
Sobre los fondos europeos, Roca ha sostenido que deberían servir para proporcionar ayudas directas a las empresas y para proyectos transformadores, que las ayuden a reavivar y crear más empleos, particularmente las pymes, «que son las que más han sufrido».
Además, ha defendido que conviene que la creación de empresas emergentes en Cataluña derive hacia la creación de grandes empresas, que según ella es donde se falla: «Conviene ayudarlas a crecer. Conviene crear una red potente de grandes empresas catalanas».
LEY DE CÁMARAS
Roca también ha reclamado «una vez más» ayuda para que se materialice la Ley de cámaras catalana, alegando que no es sólo una necesidad de las cámaras catalanas, sino también una obligación.
«No podemos estar sin ley. Conviene sacarla adelante. Por eso, y ahora que iniciamos una nueva legislatura en la Generalitat, es el primer tema que abordaremos, sin prisa pero sin pausa, defenderemos los derechos de las cámaras a ayudar a las empresas. Espero y os pido que os sumáis a esta defensa como miembros de las cámaras que sois», ha añadido.
Roca también ha agradecido a la exconsellera de Empresa y Conocimiento de la Generalitat Àngels Chacón, y a su secretaria general, Marta Felip, el trabajo iniciado, y ha augurado que «sea quien sea» la persona que esté al frente de la Conselleria con el nuevo Govern, lo retomará inmediatamente.