Las personas sedentarias tienen más posibilidad de morir que los más activos con la misma edad. A su vez, los cuerpos de las personas con buenos hábitos presentan características que hacen parecer 15 años más jóvenes en comparación a los sedentarios.
Sin embargo, con el paso del tiempo, es clave que la actividad en personas mayores no reduzca a movimientos de resistencia o aeróbicos, sino que, igual que los más jóvenes, es muy importante entrenar la fuerza. Ante la gran relevancia que cobra la actividad física en personas de todas las edades, es esencial que esta sea supervisada y monitoreada por expertos en un entrenamiento personal, como los que ofrece la empresa Muévete Conmigo.
Entrenamiento adaptado a cada cuerpo
Muévete Conmigo ofrece diferentes propuestas de entrenamientos que se pueden realizar tanto de manera presencial como virtualmente, pero que son personalizados y se adaptan a cada cliente y a sus objetivos buscados. En este camino, la empresa trabaja tres tipos de programas generales, que luego se orientan a la especificidad de cada individuo. Uno de ellos apunta a personas que buscan perder peso, el segundo para aquellos que tienen entre 35 y 55 años y quieren mejorar su salud y un tercero enfocado a mayores de 65 años que tienen el objetivo de mejorar la calidad de vida a través de ejercicios de equilibrio, fuerza y movilidad.
Ventajas de entrenar fuerza
Entrenar la fuerza también sirve en los mayores de 65 años de edad, tanto en hombres como en mujeres, ya que aportan múltiples beneficios, como el hecho de que retrasa la osteoporosis. Además, mejora la velocidad de la marcha en un 17 % y la fuerza de piernas entre un 20 y un 48 %. Como resultado, mejora la calidad de vida porque actividades cotidianas como subir escaleras o levantarse de la silla dejan de ser un problema. También ataca enfermedades asociadas al envejecimiento que son motivadas por el sedentarismo y el gran consumo de calorías. Otros beneficios son la reducción de la inflamación y de la hipertensión, la anulación de la resistencia a la insulina o la movilización de grasas.
Muévete Conmigo desarrolla sus programas con la información de cada usuario y, además, los adapta a los objetivos de cada persona y a las características específicas de sus cuerpos. Gracias a ello, se consigue lograr el mejor entrenamiento para que cada persona pueda cumplir sus objetivos y alcanzar un mayor bienestar.