La Comisión Europea ha anunciado este viernes el inicio de una investigación para determinar si es necesario prorrogar las salvaguardas a las importaciones de cerca de una treintena de productos derivados del acero que impone desde 2018 y cuya vigencia expirará el próximo junio.
Bruselas quiere determinar si los aranceles del 25% que se impone a estas categorías siderúrgicas cuando exceden los contingentes fijados siguen siendo necesarias para proteger a los productores europeos, tal y como defienden una docena de Estados miembro que han solicitado que la UE mantenga estas medidas.
Según han informado los servicios comunitarios, se trata de decidir si las salvaguardas que se han aplicado durante los últimos tres años a países terceros siguen haciendo falta para «evitar o reparar un perjuicio grave».
El Ejecutivo comunitario también examinará si hay pruebas de que los productores europeos se han adaptado o no y si una eventual prórroga redundaría en interés de la Unión.
Del resultado de la investigación y las conclusiones sacadas dependerá también cuál será la duración que tendrá la prórroga, en caso de que Bruselas finalmente decida adoptarla.
Aunque no hay un calendario preciso para la conclusión de la investigación, la Comisión recuerda que en todo caso será antes del 30 de junio de este año, fecha en la que expirarán las salvaguardas actuales.