Los visados de reforma y rehabilitación de edificios alcanzaron entre enero y julio las 17.935 unidades, un 10,12% menos que en el mismo periodo del año anterior, a pesar de que el Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia (PRTR) contempla una partida de 3.420 millones de euros, procedentes de los fondos europeos, para las ayudas a la rehabilitación.
De esos 17.935 visados, 14.493 estaban destinados a la reforma y rehabilitación de viviendas, un 12,47% menos que entre enero y julio de 2021, mientras que los visados para otros usos aumentaron un 1,19% en los siete primeros meses del año, hasta las 3.442 unidades, según los datos del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) facilitados a Europa Press.
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, anunció a comienzos de esta semana que el 80% de los hogares ya pueden pedir las subvenciones europeas para rehabilitación residencial, en el marco de las inversiones previstas en el PRTR.
Casi todas las comunidades ya han publicado las convocatorias de ayudas del programa de rehabilitación para la recuperación económica y social en entornos residenciales, dotado con 3.420 millones de euros, de los que ya se han movilizado 1.151 millones y están en proceso 1.389 millones.
El Mitma estima que el parque edificatorio español cuenta, aproximadamente, con 25,7 millones de viviendas, de las que cerca de 19 millones son primera residencia. De ellas, más de la mitad se construyeron antes de 1980, por lo que «son muy mejorables» en eficiencia energética. Además, más de un millón están en mal estado, deficiente o ruinoso.
Sánchez también comentó que la tasa de rehabilitación en España no alcanza el 0,1% anual del total de viviendas, por lo que, con los fondos, se persigue contribuir a impulsar este tipo de inversiones.
El objetivo del Mitma es conseguir unas 300.000 actuaciones al año, que es la meta fijada a 2030 en el Plan Nacional Integrado de Economía y Clima, de manera que para ese año se hayan rehabilitado 1,2 millones de viviendas.
El fabricante de sistemas de aislamiento térmico y materiales de construcción Sto considera que esa caída en los visados de rehabilitación responde a la «falta de un modelo único para la gestión de ayudas» y cree que su reparto autonómico «resta eficiencia al proceso».
«Hay regiones que todavía no han puesto en marcha el procedimiento para solicitarlas y estas ayudas caducan en el 2023, por lo que quedan pocos meses para acometer las obras», apuntan.
A eso se suma un «contexto económico complejo» y el «desconocimiento del ahorro real que supone tener una vivienda eficiente», según señalan en un comunicado. Asimismo, entre las posibles causas de este descenso de la restauración, Sto cita la falta de mano de obra cualificada y la escasa adopción de la innovación y procesos digitales, que hace que la construcción siga siendo «una industria tradicional».
No obstante, Sto defiende que el mercado español ofrece muchas oportunidades para impulsar la rehabilitación y hacer de este sector «una de las principales palancas para la construcción y la economía».