La vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, ha asegurado este viernes que el Ejecutivo trabaja con un escenario de desaceleración de precios a partir de septiembre, después de que hoy el Instituto Nacional de Estadística (INE) confirmase un IPC del 10,8% en julio, su nivel más alto desde 1984.
Así lo ha señalado Calviño en declaraciones a los medios de comunicación en Vigo, donde ha acudido para ser la pregonera del acto de celebración del Día de Galicia en la ciudad.
La ministra ha asegurado que tanto el Banco Central Europeo (BCE) como el Banco de España prevén que los precios se desaceleren a partir de septiembre, pero ha reivindicado que el Gobierno ya ha tomado medidas que están siendo eficaces para contener el alza de los precios y apoyar a las rentas de las familias.
Calviño ha lamentado el importante alza de los precios de la energía en los mercados internacionales y de otras materias primas a raíz de la guerra en Ucrania, lo que, según ella, aceleró el aumento de precios en España.
«Con Vladimir Putin (presidente de Rusia) hay que prepararse para lo peor y es lo que estamos haciendo, adoptando con nuestros socios europeos un conjunto de medidas que sean eficaces para amortiguar un posible impacto de sus decisiones», ha reivindicado la vicepresidenta primera del Ejecutivo de Pedro Sánchez.
Todo ello después de que el INE confirmase este viernes que el Índice de Precios de Consumo cayó un 0,3% en julio en relación al mes anterior, aunque disparó su tasa interanual hasta el 10,8% puntos, su nivel más alto desde septiembre de 1984 y seis décimas por encima de la registrada en junio.