El grupo financiero estadounidense Goldman Sachs se ha deshecho de su participación en Repsol, donde ha llegado a tener de forma puntual el 5,66% del accionariado.
Así, un día después de comunicar a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que ostentaba un 5,662% en el capital de la multienergética (la mayor parte en derivados y swaps), porcentaje valorado en unos mil millones de euros, Goldman Sachs ha notificado que ha reducido su participación en Repsol al 0,648%.
La firma, que mantiene su participación remanente en swaps que vencen entre este año y el próximo, indica al supervisor que dado que las posiciones en Repsol han caído por debajo del 5%, los derechos de voto en la cartera de negociación están exentos de reporte informativo.
Este movimiento de un día para otro en el accionariado de Repsol sugiere que la participación de Goldman podría responder a una cobertura de posiciones de clientes, informaron a Europa Press en fuentes del mercado.
De este modo, el núcleo estable de accionistas de Repsol se mantiene con BlackRock con un 5,4%, seguido de Norges Bank, con un 3,3% y de Amundi, con un 3,2%. JP Morgan, que supera el 6,59%, ha efectuado rotaciones con su participación, de modo que en ocasiones baja incluso del 3%, con lo que no es considerado un accionista estable.
Sacyr se desprendió hace unas semanas del 2,9% que conservaba en el capital de la empresa presidida por Antonio Brufau, donde llegó a ser accionista de referencia con más del 20% en en año 2006.
Los títulos de Repsol cayeron este miércoles un ligero 0,08%, tras recuperarse del varapalo del 5% experimentado el martes ante el nuevo impuesto que quiere imponer el Gobierno a las empresas energéticas y después de que la cotización del crudo cayese por debajo de los 100 dólares el barril de Brent.