Vivir en una casa de cristal tiene sus pros y sus contras, ahí toca medir en la balanza lo que más compensa. Como en este nuevo diseño moderno y transparente en Belgrado, la capital de Serbia, que ofrece una estructura de acero y vidrio sobre dos enormes volúmenes de hormigón. Mucha luz, bonitas vistas con una estética futuristas, pero con escasa privacidad, aunque cuenta con cortinas y chapas de acero a modo de persianas.
El estudio TEN, con sede en Zúrich, diseñó esta vivienda de un solo piso sobra la ladera de la montaña Avala, un paisaje rural cercano a la gran ciudad, de 156 metros cuadrados. En su interior está discretamente dividido por una serie de cortinas de suelo a techo que definen el área para dormir desde la cocina, el comedor, la sala de estar y el baño.
