La depresión es una enfermedad mental que se caracteriza por la persistencia de un bajo estado de ánimo y sentimientos de tristeza que, a su vez, llevan a alteraciones en el pensamiento, el grado de actividad y el comportamiento de una persona.
Algunos de sus síntomas son la pérdida de interés y de la capacidad de disfrutar. Los pacientes que sufren esta patología también suelen padecer un cansancio exagerado aún sin realizar grandes esfuerzos.
Además, la depresión está asociada a la aparición de sentimientos de culpa, incapacidad, irritabilidad y pesimismo. En los casos más graves, son frecuentes las ideas sobre la muerte o el suicidio. De forma asociada, en muchos pacientes se produce una disminución de la libido y del apetito, mientras que también se desarrollan trastornos del sueño.
Tratamientos tradicionales para la depresión
Por lo general, los cuadros de depresión se intentan tratar con una combinación entre sesiones de terapia psicológica y la aplicación de fármacos. El objetivo es que el paciente pueda volver a sentir seguridad y confianza en sí mismo, con la ayuda de un especialista.
Al mismo tiempo, es común que se indiquen medicamentos ansiolíticos, antidepresivos y otros fármacos de refuerzo como las hormonas tiroideas, el carbonato de litio y los psicoestimulantes. Estos tratamientos buscan que el paciente se involucre activamente en su propia recuperación y que pueda estar alerta para evitar recaídas.
Técnicas alternativas contra la depresión: neuromodulación, neurofeedback y TDCS
Actualmente, existen varias formas alternativas para combatir la depresión, sin recurrir a medicación y logrando una solución efectiva. En este sentido, las técnicas de neuromodulación permiten modificar la actividad del sistema nervioso en beneficio del organismo. Por ejemplo, la TMS o Estimulación Magnética Transcraneal permite la estimulación indolora del tejido nervioso, aplicando estímulos magnéticos que modifican la excitabilidad del cerebro y mejoran el funcionamiento de algunos de sus circuitos, resultando beneficioso en casos de depresión crónica.
Otra técnica de neuromodulación es el neurofeedback, una terapia en la que se mide y mapea la actividad cerebral para después regular la función eléctrica y, así, lograr mejorar la enfermedad de la persona.
Por último, la estimulación transcraneal de corriente directa (TDCS) es una técnica no invasiva en la que se utiliza un dispositivo clínico con una corriente eléctrica de baja intensidad para estimular distintas áreas del cerebro del paciente.
En España, la red de centros de neuropsicología Sábilis, que tiene base en Oviedo, es una de las instituciones pioneras en el uso de estas técnicas que han sido probadas como las únicas eficaces para abordar trastornos psicológicos como la depresión sin recurrir al uso de fármacos.
De esta manera, los tratamientos que se aplican en Sábilis contra la depresión buscan corregir los desequilibrios eléctricos y bioquímicos del cerebro. Las distintas técnicas mencionadas se pueden combinar a lo largo de varias sesiones para restaurar el normal funcionamiento de la mente y eliminar todos los síntomas. En todos los casos, las aplicaciones son indoloras, no invasivas y sin efectos secundarios.