Cada vez son más las empresas que han descubierto que la digitalización empresarial es un paso que se debe tomar si se desea conseguir mejores resultados en el negocio. Las nuevas tecnologías continúan desarrollándose a un nivel imparable y para las empresas es casi una obligación adaptarse a esos cambios.
Está visto y comprobado que adentrarse en el mundo digital es una victoria garantizada si se desea que el negocio triunfe. Cabe destacar que se trata de un proceso extenso, pero la empresa será recompensada si se han llevado a cabo los pasos de manera correcta.
¿Qué es la digitalización?
No es difícil encontrar gente con un concepto erróneo de en qué consiste la digitalización. Habitualmente, se confunde con una simple mejora del software y un uso más activo de las redes sociales, pero se trata de un cambio mucho más sustancial. El proceso de la digitalización consiste en un cambio interno y externo de la empresa donde, tomando las nuevas tecnologías como principal base, se realizan una serie de cambios para introducir su negocio en el mundo digital.
Estos cambios influirán en diferentes aspectos de la empresa, desde cosas tan internas como el modelo de negocio, hasta la forma de trabajo de los empleados.
Para conocer más detalles del proceso de digitalización se puede consultarse el post completo.
Agentes digitalizadores
Realizar la digitalización de una empresa es una tendencia creciente en el sector empresarial. Miles de empresas persiguen este objetivo sin disponer de los medios para poder conseguirlo. Es cierto que puede parecer un proceso sencillo para una empresa grande, pero la cosa cambia cuando se trata de empresas formadas por pocas personas (pymes o microempresas).
Es aquí donde cobra gran importancia la figura de los “agentes digitalizadores”. Estas empresas, especialistas en prestar servicios digitales a otras organizaciones, se ha designado en la oferta de Kit Digital del Gobierno como los artífices de la digitalización de las empresas que carecen del presupuesto necesario para realizarla por sí mismos. Gracias a la ayuda de estos agentes digitalizadores, las pequeñas empresas podrán aventurarse en el mundo digital y disfrutar de sus ventajas.
Puede solicitarse más información del Kit Digital en Infoser, compañía especializada en ofrecer este tipo de servicios desde hace más de 30 años.
El reto de la digitalización
Es importante destacar que muchas empresas se consideran aptas para afrontar este proceso, pero no todas lo están realmente. Realizar con éxito la digitalización puede llegar a ser un completo desafío, sobre todo por gran esfuerzo inicial que se tiene que llevar a cabo.
El comienzo de este gran cambio requiere una inversión grande y una continuidad de un año al menos para poder observar unos beneficios tangibles. Este esfuerzo económico no siempre puede ser asumido por organizaciones de pequeño tamaño. Por eso, es de gran importancia el proyecto del Kit Digital, promovido por el Gobierno de España sobre la base de los fondos Europeos “Next Generation”, que ofrecen financiación del 100% para proyectos de presencia Web, e-commerce, redes sociales, aplicaciones de gestión interconectadas, seguridad cibernética, etc. El periodo cubierto por estos proyectos es de 1 año, tiempo suficiente para que una empresa comience a tener experiencia y pueda obtener rentabilidad de sus nuevas capacidades digitales.
Competitividad entre empresas
Con la llegada de la transformación digital, el concepto de globalización cobra cada vez más fuerza. Las empresas tienden a expandirse estableciendo su presencia en diferentes lugares, algo que influye directamente en sus modelos de negocio. Algo que parecía inamovible como lo era el modelo de negocio de muchas empresas tradicionales, ahora es un elemento que necesita cambios y adaptaciones si se quiere llegar a competir con el resto de empresas.
Tan radical se ha vuelto la competitividad en este sector que han surgido nuevas alianzas entre organizaciones para optimizar procesos y así colocarse por encima de sus principales competidores. Como se ha mencionado anteriormente, la globalización aumenta su presencia, ejerciendo presión al resto de empresas para que realicen su transformación digital o se queden atrás en el ámbito de sus respectivos mercados.
La era digital
La tecnología se mueve a pasos agigantados sin dejar claro qué cambios podrán ser los próximos. La única solución a esta incertidumbre digital es adaptarse lo mejor que se pueda a los grandes cambios. Ningún argumento puede llegar a justificar el mantener los modelos de negocio antiguos, ya que ello supone una perdida de competitividad y un aumento de costes respecto a otros competidores que utilicen a fondo nuevas tecnologías. El cambio digital ha dejado de ser una posibilidad para convertirse en una obligación si el objetivo de una empresa es obtener los mayores beneficios posibles. Adaptarse a la nueva era digital es la mejor opción para salir exitoso en una sociedad donde gobierna la tecnología.