Alemania se plantea ya cómo pagará las deudas contraídas por la pandemia y, descartadas las subidas de impuestos en año electoral, el debate gira en torno a la reforma de los límites constitucionales al déficit y la venta de sus acciones en empresas cotizadas.
El Gobierno alemán ha puesto en marcha uno de los programas más generosos a nivel internacional para minimizar los efectos de la crisis.