Siemens Energy, empresa escindida de Siemens el año pasado y propietaria del 67% de Siemens Gamesa Renewable Energy, planea recortar alrededor de 7.800 puestos de trabajo hasta 2025 en el segmento de gas y electricidad para reducir sus costes anuales y mejorar la competitividad de la compañía, que cuenta con una plantilla de 92.000 trabajadores.
La multinacional precisó que, de esta cifra, unos 3.000 empleos serán suprimidos en Alemania y otros 1.700 en Estados Unidos, mientras que se verán afectados otros 3.100 puestos en el resto del mundo. Asimismo, precisó que tres cuartas partes del recorte se centrará en las áreas de gestión, administración y ventas.
El ajuste de plantilla, que se sumará a otras medidas que se están implementando en la compañía, busca lograr un ahorro de costes de un mínimo de 300 millones de euros año en el segmento de gas y electricidad, mientras que el impacto adverso extraordinario por costes de reestructuración estimado oscilará entre los 500 y 900 millones entre los años 2020 y 2023.
Siemens Energy planea llevar a cabo la reducción de su plantilla hasta el final de su ejercicio fiscal 2025, aunque prevé que la mayor parte se habrá implementado para finales del ejercicio 2023, por lo que confía en llegar lo antes posible a un acuerdo sobre las medidas planteadas con los representantes de los trabajadores.
«El mercado de la energía está cambiando significativamente, lo que nos ofrece oportunidades pero al mismo tiempo nos presenta grandes desafíos», dijo Christian Bruch, consejero delegado de Siemens Energy, quien defendió que, con este programa, la compañía quiere recuperar su competitividad y fortaleza financiera.
«Somos plenamente conscientes de que este es un programa difícil para nuestros empleados. Por lo tanto, emprenderemos estas medidas de la manera más socialmente responsable posible», añadió.
A pesar del plan de ajuste anunciado, la compañía ha reiterado su expectativa de alcanzar un margen de Ebita ajustado antes de extraordinarios de entre el 6,5% y el 8,5% para 2023.