Moody’s ha cambiado la perspectiva del sector de telecomunicaciones de América Latina desde ‘estable’ a ‘positiva’ ante un mayor resultado bruto de explotación (Ebitda) de la industria, que se verá impulsada por las eficiencias, fusiones, adquisiciones e inversiones «sólidas y estables» que generarán un flujo de efectivo libre positivo en las empresas del sector.
En un comunicado emitido este martes, la analista de Moody’s Rosa Morales ha explicado que los márgenes Ebitda de las compañías del sector se incrementarán en este periodo a medida que continúen capitalizando las eficiencias que obtuvieron durante 2020 en el confinamiento.
«A medida que entremos en 2023, algunas compañías también aprovecharán los beneficios de las fusiones y adquisiciones ejecutadas incluso antes de la pandemia, con un estímulo adicional gracias a la recuperación esperada, particularmente en las economás vinculadas al turismo», ha añadido Morales.
Por su parte, los gastos de capital de la industria ‘teleco’ serán más estables en 2022 y 2023 en comparación con años anteriores, con un 19,5% de los ingresos dedicados a esta partida, que alcanzarán el entorno de los 14.700 millones de dólares (13.977 millones de euros).
La agencia crediticia también ha puntualizado que la inflación y la competencia frenarán el crecimiento de los ingresos de los operadores de telecomunicaciones latinoamericanos en 2022, debido a las nuevas presiones sobre los precios por la guerra en Ucrania, incluyendo la posible interrupción en la cadena de suministro.
«Estos riesgos no forman parte de nuestro escenario base, pero persistirán a medida que continúe la crisis. Sin embargo, los fundamentos de largo plazo, incluyendo un mayor consumo de datos y tasas de penetración en la región, seguirán beneficiando al sector», concluye Moody’s.
