Mentoring educativo, estrategia exitosa para maximizar los resultados académicos de los estudiantes

Por Remitido

En el modelo educativo tradicional, los docentes transmiten sus conocimientos a un alumnado amplio, heterogéneo y con intereses divergentes, sin hacer énfasis en los objetivos particulares y en las necesidades educativas de cada individuo.

Esto puede derivar en falta de motivación y entusiasmo, y a su vez, en un bajo rendimiento académico.

Por tal motivo, el acompañamiento en la práctica es fundamental en un proceso de aprendizaje que posibilite al alumno un desarrollo personal y social eficaz. Para ello, el mentoring para los estudiantes que ofrece Lenae se basa en enseñarles hábitos organizativos y estrategias académicas que maximicen sus resultados académicos y la concentración, asegurando la consecución de sus propias metas.

Las ventajas del mentoring educativo

El servicio de mentoring educativo que proporciona esta compañía busca ayudar al estudiante a estimular sus intereses y su potencial para llegar al éxito en el ámbito académico. Así, por medio de rutinas y hábitos de estudio, con un acompañamiento continuo, se apunta a gestionar el tiempo del alumno de manera eficiente para incrementar su productividad.

Para tal fin, se identifican sus propósitos, fortalezas y puntos débiles y se trazan objetivos a corto, medio y largo plazo que organizan sus actividades académicas y personales. De esta manera, se fomenta la motivación, la concentración, el esfuerzo y la disciplina, a la vez que se reduce el estrés académico, logrando así jóvenes con mayor autoconfianza, productividad, autonomía y compromiso con lo que hacen.

La importancia de contar con la ayuda de un mentor

Son muchos los casos en los que los padres se encuentran superados ante los distintos problemas de aprendizaje que pueden presentar sus hijos, ya sea el bajo rendimiento, problemas de concentración, deficit de atención o falta de motivación, entre otros. Ante esa preocupación, se suele recurrir a profesores particulares o clases de apoyo que puedan suplir y remediar esas dificultades. No obstante, si bien tienen una utilidad, estos recursos no permiten reformar las estructuras de pensamiento y las prácticas pedagógicas del sistema educativo que hacen interfieren en el rendimiento del estudiante.

Por lo tanto, para aquellas familias que pretendan que los momentos de transición escolar o el pasaje de la secundaria a la universidad sean mucho más armónicos, con un excelente rendimiento académico, un desarrollo personal y social óptimo y con las competencias necesarias para satisfacer tanto las demandas curriculares como las de la vida fuera de la academia, el mentoring es una gran alternativa a favor de que sus hijos puedan elegir el futuro de manera crítica, organizativa y autónoma.