SAP es una empresa tecnológica, de modo que sumarse al teletrabajo no le ha costado en exceso: lleva décadas practicándolo. Aun así, el Covid le ha traído también quebraderos de cabeza: «Esta situación nos ha llevado a trabajar en un entorno completamente diferente, con muy pocas posibilidades de viajar, visitar clientes, etcétera. Afortunadamente, los sistemas tecnológicos nos han permitido seguir prestando servicio a los clientes y mantener la continuidad del negocio», señala Rafael Brugnini, director general de SAP en España.
En nuestro país son más de 8.000 empresas las que tienen sus sistemas de gestión y operativa diaria funcionando con SAP. Por eso durante este tiempo la prioridad del primer al último empleado de SAP ha sido garantizar la continuidad en todos esos clientes. De cara al futuro, Brugnini espera «que el cierre de empresas en España por la crisis del Covid-19 se quede en las 85.000 que señala McKinsey», añade (a cierre de 2020 habían cerrado 68.000).
Brugnini piensa que esta crisis nos ha mostrado la necesidad de adaptarnos con rapidez a los cambios de nuestro entorno: «Creemos que la solución está en ayudar a las empresas para que se puedan adaptar a esos entornos cambiantes, algo que se logra con la transformación digital, fundamentalmente de las pymes -las más retrasadas en ese ámbito-, y de la Administración Pública. Es fundamental ayudarlas a dar el salto a la nube. También es importante mejorar las competencias y la formación digital de la población y romper la brecha digital existente entre distintas regiones llevando la conectividad a todos los rincones de España».
