Como para todos, el Covid está suponiendo una gran prueba para el grupo de alimentación Calvo. En marzo tuvieron que adaptar sus protocolos y procesos a la situación sanitaria. «La prioridad fue, y sigue siendo, la salud de nuestros colaboradores y la seguridad en nuestras fábricas y operaciones. Después tuvimos que hacer frente a una situación de mercado igualmente excepcional. En nuestro caso tuvo que ver con un incremento notable de la demanda por parte de nuestros clientes que tuvimos que atender. Ampliamos un turno adicional de producción de fin de semana para hacer frente a dicha demanda no solo en España: también en otros países de Europa como Italia», señala Mané Calvo en el primer número de Corporate.
Desde entonces Calvo sigue muy cerca de sus clientes para garantizar el suministro. Han replanteado la operativa para hacer frente a las circunstancias. «La logística y las redes de distribución han resistido muy bien. Pese a los niveles de estrés, el sector agroalimentario ha demostrado que es muy resiliente. No creo que haya un sector que esté tan cercano a las necesidades de sus clientes y tan acostumbrado a los cambios. La clave está en la agilidad. El gran aprendizaje de esta situación está relacionado con la flexibilidad y la capacidad de adaptación a un nuevo consumidor volátil y en constante proceso de cambio, y a la incertidumbre de la situación social y económica», explica Calvo.
Calvo sigue inmerso en un plan de transformación de sus plantas para hacerlas más eficientes, sostenibles y ágiles a la hora de afrontar las necesidades del mercado. Esa flexibilidad y el esfuerzo de sus colaboradores les permite afrontar la situación «de una forma en la que estamos muy satisfechos», indica Calvo.
Sobre el futuro, el CEO de esta compañía piensa que «estamos en una carrera de fondo en la que tendremos que demostrar la suficiente flexibilidad y agilidad para ir adaptándonos a la situación de la pandemia. La necesaria intervención de los bancos centrales, la solidez europea, el trabajo de las empresas, la responsabilidad ciudadana… Todos tenemos que hacer un gran esfuerzo, pero que este esfuerzo histórico sirva para mejorar y que, de verdad, podamos salir reforzados».
En opinión de Calvo, en la medida de lo posible, podemos «aprovechar esta crisis para replantearnos, repensar y transformar el modelo. La innovación sigue siendo irrenunciable, como también lo es seguir atendiendo a los retos medioambientales».