Aunque la situación del Covid ha sido y está siendo dura, en Capital Energy están contentos con los resultados de su gestión de la crisis. Desde el principio tomaron medidas para salvaguardar la salud de sus empleados. Como otras empresas, posteriormente fueron permitiendo el regreso de los trabajadores y adaptando las oficinas de acuerdo con las medidas de seguridad. Su estrategia les ha dado «el resultado esperado, dado que el índice de contagios de la plantilla, que ha pasado de 30 a 270 empleados en dos años, ha sido muy bajo», señala Francisco Clemente, director general de Capital Energy, en el número uno de la revista Corporate, a la venta en los quioscos.
La compañía pone énfasis en el cuidado de los empleados y ha obtenido reconocimientos por ello. Además, sus trabajadores están habituados a trabajar en remoto, y ello les ha permitido seguir impulsando su plan de negocio, «que contempla la inversión de 10.000 millones de euros hasta 2025 para convertirnos en la primera eléctrica verticalmente integrada 100% renovable en la Península Ibérica».
Clemente está convencido de que «el sector de las renovables va a ser uno de los impulsores de la recuperación socioeconómica española; y no sólo por su contribución a la reconstrucción del tejido empresarial y a la creación de empleo, sino por su potencial para luchar contra la despoblación de muchas zonas rurales». El director general corporativo de Capital Energy afirma que «estamos frente a una oportunidad única de llevar a cabo una profunda transformación del actual modelo energético hacia uno plenamente sostenible. Para lograrlo, necesitamos acelerar la implantación de tecnologías de generación de electricidad limpias y aprovechar la digitalización de cara a maximizar la eficiencia en beneficio de los clientes, que van a pasar a tener un papel protagonista».
Sus respuestas al completo, en el quiosco.