Durante mucho tiempo, las personas se han planteado la incógnita de si un genio nace o se hace.
Aunque muchos afirman que es un atributo de nacimiento, recientes investigaciones de carácter científico como el del Método Genius han demostrado que con una estrategia de estudio personalizada, se pueden desarrollar al máximo las habilidades cognitivas. Según esta investigación un genio puede formarse, siempre y cuando se utilicen los métodos de estudio adecuados de forma individual.
La importancia de contar con un buen método de estudio
A lo largo de la historia de la humanidad han existido verdaderos genios en diferentes áreas, personas con un conocimiento y un nivel de comprensión de las cosas tan avanzado que superan notablemente a lo que el individuo promedio puede alcanzar. Por muchos años se ha creído que se trata de casos excepcionales, personas que nacen con estas características por casualidades genéticas o sencillamente incomprensibles. Sin embargo, hay quienes piensan que, de hecho, las mentes excepcionales son producto de la estimulación adecuada de los procesos cognitivos, es decir, del aprendizaje. Y que por lo tanto, una persona puede desarrollar al máximo su habilidad de aprender y de pensar, siempre y cuando el método de estudio sea el correcto. Esto es precisamente lo que han demostrado varios estudios científicos recientes presentados en el convenio AIRIPA, los cuales se engloban en el Método Genius, donde se demuestra con bases científicas que un método eficaz de estudio puede potenciar las habilidades y capacidades de aprendizaje, con un efecto considerable y duradero. En otras palabras, un genio efectivamente puede formarse.
Las características del Método Genius
La investigación científica sobre el método Genius ha sido encabezada por la Doctora Emilia Costa y el profesor Ricardo Venturini; en conjunto con los creadores del Curso Genius, Giacomo Navone y Massimo de Donno. Este trabajo ha sido publicado en la revista científica Professione Pedagogista”, en la cual se demuestra la eficacia del método. Con base en esto se ha creado el Curso Genius, mediante el cual se imparte un método de estudio personalizado, analizando previamente las habilidades cognitivas de los alumnos de manera individual, a través de la aplicación del test científico AMOS. Por medio de este test, se puede lograr una medición bastante precisa de aspectos como la sensibilidad metacognitiva, organización y elaboración. De la misma forma, ayuda a medir otros parámetros como la resiliencia, la ansiedad y la incoherencia. Todos estos son aspectos que tendrán un impacto importante en el rendimiento académico. Además, conociendo estos datos se puede elaborar una estrategia de estudio que garantice el máximo aprendizaje.
Después de haber realizado el curso, más de mil estudiantes fueron seleccionados para repetir el test en un plazo de 24 meses, y se han hallado resultados muy sorprendentes. Por un lado, el 84% mostró una disminución considerable de estrés y ansiedad. Además, más del 80% mejoraron sus habilidades de aprendizaje, mientras que el 96% logró retener mucha más información útil. Partiendo de estos resultados, la conclusión obvia es que no existen malos estudiantes, sino malos métodos de estudio.