La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha defendido los fondos europeos como una «oportunidad histórica» para impulsar las ciudades sostenibles, con políticas de vivienda, regeneración urbana, rehabilitación de edificios y políticas de movilidad.
Lo ha dicho este viernes en el acto del PSC ‘De Europa a los municipios: construyendo ciudades prósperas y sostenibles’, en el que ha participado junto con el eurodiputado socialista Javi López; la concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona, Laia Bonet; la diputada en el Parlament, Sílvia Paneque, y el senador socialista Antoni Poveda.
La ministra ha destacado que su Ministerio gestiona «la parte más importante» de estos fondos, concretamente, 16.000 millones de euros, de los cuales una parte se destinan a las comunidades autónomas para hacer transformaciones en los barrios y las ciudades, ha subrayado.
Sánchez ha asegurado que se trata de la inversión europea más grande «en toda la historia» y una oportunidad extraordinaria, y ha sostenido que no se debe dejar pasar este momento, en pleno proceso de transformación ecológica de la economía.
La ministra ha concretado que estos recursos irán destinados a acciones directas a través de su Ministerio, con corredores ferroviarios y grandes infraestructuras, y que deben permitir «aumentar la cuota de transporte de mercancías en tren».
Ha destacado que los fondos también servirán para la rehabilitación y construcción de edificios eficientes, y para que empresas tanto públicas como privadas renueven sus flotas de transporte colectivo: «Todo esto genera riqueza del tejido productivo», ha señalado la ministra.
Para Sánchez, los retos a los que se enfrenta la sociedad son globales y por eso ha asegurado que las administraciones públicas europeas tienen la responsabilidad de «hacer de espejo a países en los que sus ciudades se están empezando a desarrollar».
En concreto, ha citado un estudio que dice que en 2050 el 66% de la población mundial vivirá en ciudades, y que el 90% de este crecimiento urbano se producirá en Asia y África, tras lo que ha afirmado que los países europeos tienen la responsabilidad de apostar por la transición ecológica y hacer posible que los países en vías de desarrollo «no caigan en los mismos errores» que ellos.
Sánchez ha sostenido que el cambio climático también genera desigualdades entre los más desfavorecidos, los más expuestos a olas de frío y de calor y con menos recursos para protegerse.
Por eso, ha defendido que los socialistas deben situar en la justicia social «todos los elementos que deben permitir luchar contra el cambio climático y luchar contra estas desigualdades».
Sánchez quiere convertir su cartera en «el ministerio de referencia de las ciudades», y ha explicado que por eso hubo un cambio de nomenclatura y dejó de llamarse Ministerio de Fomento, por una voluntad de cambiar la concepción del transporte y la movilidad de los ciudadanos.
Ha apostado por recuperar el modelo de «ciudad mediterránea, compacta» y ha criticado que cuando gobernó el PP permitió una expansión de las ciudades, con barrios residenciales alejados de los servicios, lo que generó dependencia del transporte privado, según ella.
«Partíamos de esta visión de ciudades y debemos recuperar el modelo de ciudad de los cinco minutos o de los diez minutos, que garantice una calidad de vida urbana óptima», ha defendido Sánchez.
