Las ventas totales de las grandes empresas que operan en España, deflactadas y corregidas de variaciones estacionales y de calendario, crecieron en noviembre de 2021 un 7,2%, mientras que el empleo se incrementó un 5,3%, tras tres meses en los que el crecimiento se había estabilizado en el 4,6%.
De acuerdo con la estadística ‘Ventas, empleo y salarios en las grandes empresas’ que publica la Agencia Tributaria, el salario de los trabajadores –medido como rendimiento bruto medio– también creció pero a un menor ritmo.
En concreto, en noviembre se acumula un incremento del 1%, aunque esta evolución de los rendimientos está condicionada por los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) y por los fuertes cambios en el peso de los sectores de actividad que se han observado en estos años, según explica la Agencia Tributaria.
No obstante, este incremento de salarios en noviembre presenta un alza más notable al registrado en los cinco meses anteriores, cuando no ha superado el 0,6%. Como ejemplo, en octubre los salarios en grandes empresas crecieron un 0,2%, mientras que en septiembre lo hicieron un 0,6% o en agosto, un 0,4%.
En cuanto a las ventas de las grandes empresas, el incremento del 7,2% en noviembre es superior en casi cuatro puntos al aumento de octubre, que ya se inscribía dentro de una tendencia alcista. No obstante, se debe tener en cuenta que la comparación en estos meses se realiza respecto a un periodo en 2020 en el que las pérdidas se habían estabilizado tras los mínimos de los meses del confinamiento y la recuperación posterior, de forma que los crecimientos cada vez mayores observados desde septiembre hablan de una mejora continua de la actividad.
La fuerte recuperación de noviembre ya había sido anunciada por las ventas diarias procedentes del sistema de Suministro Inmediato de Información (SII) del IVA que desde hace unas semanas están disponibles en la web de la Agencia.
Estas ventas diarias indicaban que en noviembre el crecimiento, en términos nominales, se iba a acelerar considerablemente y así ha sucedido: antes de corregir de precios y de calendario, las ventas mensuales de las Grandes Empresas pasaron de crecer una media del 11,5% entre agosto y octubre a hacerlo por encima del 21% en noviembre.
El impulso del total de ventas viene motivado tanto por el incremento en las ventas interiores como por el fuerte crecimiento de las exportaciones.
En concreto, las ventas interiores crecieron en noviembre un 6,3%, discurriendo su trayectoria en paralelo con la de las ventas totales, ya que también en este mes se aceleraron de forma significativa (en los dos meses anteriores el incremento fue, en media, del 2,1%) y es el primero en el que el nivel supera el registro de 2019.
Fue el consumo el que impulsó el repunte al aumentar un 6,5%, muy por encima del 3,1% anterior. Las ventas de capital disminuyeron de nuevo, aunque a un ritmo más moderado que en los periodos precedentes.
De su lado, las exportaciones también crecieron más que en los meses anteriores –11,9% frente al 7,3% previo–. Las dirigidas a terceros países continúan siendo las más dinámicas (aunque hay que restar el efecto brexit), aunque destaca el crecimiento de las destinadas a la Unión Europea tras cuatro meses de descensos.
