Pocos edificios en Lisboa han resistido al paso del tiempo. Miles de construcciones quedaron destruidas por el terremoto del 1 de noviembre de 1755, y desde entonces otras tantas han sido demolidas para dar paso a edificios más modernos. Pero lo cierto es que todavía quedan algunas casas en la capital de más de 500 años de antigüedad. Y situada en la Rua dos Cegos, en Alfama, se encuentra la casa más antigua de todas.
Esta vivienda del siglo XVI sobrevivió al terremoto que azotó Lisboa hace más de 250 años. Y todo gracias a sus sólidos pilares y su estratégica ubicación en la colina más alta de la capital, según escribe la revista Vortex.
Las características estéticas que refleja propias de su época de creación son varias. Desde la entrada en el primer piso, que registra una arquitectura medieval, hasta el panel de azulejos del siglo XX, en estilo del siglo XVI, utilizado para decorar la fachada.
Hoy en día, la casa más antigua de Lisboa está rodeada de otros edificios con un diseño diferente, que no respetan la estética tradicional de las casas de la ciudad. De hecho, según indica la revista, todo indica que las casas que solía haber junto a esta tenían el mismo estilo arquitectónico, pero fueron demolidas en la década de 1940.
A parte de este, existe más casos de edificios que resistieron el terremoto y continúan en pie, así como planes de reconstrucción como el de la ciudad del Marqués de Pombal. La mayoría de estos edificios se encuentran principalmente en Alfama, como por ejemplo la casa ubicada en Largo do Menino Deus.