Las gestoras Ashmore y BlackRock y los bancos UBS y HSBC acumulan una exposición total de 1.312 millones de dólares (1.118 millones de euros) en bonos del promotor inmobiliario China Evergrande Group, sobre cuyo posible ‘default’ se lleva especulando varias semanas.
De acuerdo con los datos de tenedores de bonos que aparecen en el terminal de ‘Bloomberg’, analizados por Europa Press, la gestora británica de inversiones Ashmore, especializada en mercados emergentes, cuenta con una exposición de 433,1 millones de dólares (369,3 millones de euros) a bonos emitidos por el gigante chino. Es la empresa que mayor cantidad ha invertido en deuda de la promotora.
En segundo lugar se sitúa el gestor de fondos de inversión BlackRock, que mantenía según los últimos datos disponibles un total de 397 millones (338,5 millones de euros) de deuda de Evergrande. Por detrás se situaron UBS, con 275,7 millones (235 millones de euros) y HSBC, con 206,9 millones (176,4 millones de euros).
En los últimos años, Evergrande ha emitido tres tipos de bonos diferentes. Los denominados en dólares acumulan una cuantía de 19.200 millones (16.369,6 millones de euros), mientras que los denominados en yuanes se sitúan en 58.500 millones (7.709 millones de euros) y los emitidos en dólares de Hong Kong ascienden a 7.700 millones (843,2 millones de euros).
Sin embargo, los bonos emitidos en los mercados por parte de la inmobiliaria suponen una pequeña parte de sus deudas totales. Según figura en las cuentas del segundo trimestre, publicadas a finales de agosto, Evergrande acumula préstamos (los bonos emitidos, pero también otros instrumentos como créditos bancarios) por valor de 571.775 millones de yuanes (75.348 millones de euros).
Parte de las deudas también son impuestos sobre beneficios cuyo pago han diferido en el tiempo. En total, Evergrande registra 215.700 millones (28.424,8 millones de euros) en tributos pendientes de pago.
Sin embargo, la mayor parte de sus deudas son las cuentas a pagar a proveedores, que a 30 de junio de 2021 alcanzaban los 951.133 millones de yuanes (125.339,6 millones de euros), casi la mitad de sus deudas totales. En total, los pasivos de Evergrande son cerca de 1,966 billones de yuanes (259.078 millones de euros).
De su lado, la promotora contaba con unos activos valorados en 2,377 billones de yuanes (313.239 millones de euros). De esa cifra, 1,278 billones (168.413 millones de euros), casi el 54%, eran proyectos inacabados, mientras que únicamente 144.514 millones de yuanes (19.044 millones de euros) eran inmuebles finalizados y en venta.
PODRÁN ABONAR EL PAGO ESTE JUEVES
La filial del conglomerado China Evergrande Group, Hengda Real Estate Group, ha afirmado este miércoles que ha llegado a un acuerdo con los bonistas para el pago del cupón de uno de sus bonos, prevista para este jueves.
El importe asciende a 232 millones de yuanes (30,6 millones de euros) y, de momento, no se sabe si la promotora podrá realizarlo al completo o no. Los mercados no han reaccionado a la noticia, ya que la Bolsa de Hong Kong estuvo cerrada por el Festival de Medio Otoño asiático.
Por su parte, las Bolsas europeas, que registraron fuertes pérdidas el lunes por el miedo de los inversores al colapso de Evergrande, han cerrado la sesión de este miércoles en positivo, al igual que Wall Street, que cotizaba en verde a cierre del mercado español.
Los inversores no temen, en general, un «gran contagio» de Evergrande al resto de mercados mundiales, aunque el banco privado suizo Julius Baer anticipa que la volatilidad en el sector financiero se mantendrá. Pese a este contexto, considera que «el mercado inmobiliario asiático es demasiado atractivo para ser ignorado a largo plazo».
«Evergrande únicamente representa el 0,24% de la exposición total de los préstamos de la banca china, por lo que en este caso no apreciamos ningún riesgo sistémico», ha destacado el director de inversiones de Julius Baer, Yves Bonzon.
Por otra parte, Julius Baer considera que de no poder hacer Evergrande frente a la situación, su rescate por parte del Gobierno chino «entraría en conflicto con la nueva filosofía de prosperidad común», mientras que su colapso provocaría una gran onda de choque en el mercado inmobiliario y podría afectar gravemente a los contratistas de la promotora.
«Su impago podría arrastrar a muchas de sus empresas homólogas en la cadena de suministro, y podría hacer subir los índices de morosidad del sistema bancario chino. Un impago de Evergrande también podría provocar un retraso significativo en la entrega de esas viviendas y podría tener también implicaciones sociales», coincide el gestor de fondos de renta variable asiática de Schroders, Robin Parbrook.
El responsable de Renta Variable de Mercados Emergentes de esa firma, Tom Wilson, ha destacado que es «poco probable» que el Gobierno se limite a rescatar a la empresa o a dejarla colapsar de forma desordenada.
«Más bien creemos que intentará limitar las consecuencias económicas y rescatar a ciertos acreedores», ha señalado.
De todas formas, la mayor parte de las firmas descartan que el colapso de Evergrande vaya a tener un fuerte impacto en otras economías mundiales.
Barclays, por ejemplo, considera que Evergrande no es «ni de cerca» el Lehman Brothers chino, pese al gran tamaño de la compañía y el riesgo de contagio a otras compañías de ese sector: una crisis similar a la que provocó la quiebra del banco estadounidense tiene «una magnitud muy diferente».
PERSPECTIVAS PARA EL MERCADO INMOBILIARIO CHINO
Schroders ha señalado que en renta variable, el sentimiento hacia el sector inmobiliario chino se mantiene deprimido, al igual que para otros actores de la cadena de suministro, como los proveedores de electrodomésticos y muebles.
En renta fija, la gestora explica que el aumento de la dispersión crediticia «se ha hecho más evidente» y es probable que los promotores de menor calificación y con perfiles crediticios más débiles sean los que más riesgo corran en este entorno.
«Seguimos siendo muy selectivos y cautelosos dentro de este sector, y nos centramos en los emisores de mayor calidad, principalmente BBB y BB, que se consideran más propensos a superar la volatilidad actual», a destacado el responsable de renta fija asiática de Schroders, Roy Diao.
En el caso de Nordea, la gestora sigue sobreponderada en el sector inmobiliario, aunque sin exposición directa a Evergrande y sin ninguna otra exposición directa a promotores inmobiliarios en China.