El Dr. Daniel Cabezalí explica cómo abordar el hipospadias desde el diagnóstico hasta la recuperación

Por Remitido

El hipospadias es una malformación congénita que afecta tanto al sistema urinario como al órgano reproductor masculino. Esta condición, caracterizada por un defecto ventral de la uretra y una curvatura, se presenta en distintos grados de gravedad dependiendo de la ubicación del meato urinario y el grado de curvatura. Según su proximidad al glande o a la base de la zona genital, esta malformación puede generar complicaciones funcionales y estéticas que impactan desde la infancia hasta la vida adulta.

El Dr. Daniel Cabezalí, reconocido especialista en urología pediátrica en Madrid, ofrece un enfoque integral para el diagnóstico y tratamiento del hipospadias, garantizando soluciones personalizadas para cada caso. Esta patología requiere una intervención quirúrgica temprana, generalmente a partir de los dos años de edad, para prevenir futuros problemas funcionales.

Qué es el hipospadias y sus causas asociadas

El diagnóstico de hipospadias suele realizarse al nacer mediante un examen físico, donde se evalúa la posición del meato urinario y la presencia de una posible curvatura. En casos más sutiles, los padres pueden observar señales como una apertura uretral fuera de la punta, un flujo de orina anómalo o un aspecto extraño de los genitales durante los primeros meses de vida.

En el proceso diagnóstico, es fundamental considerar las causas de hipospadias, que incluyen factores genéticos, antecedentes familiares y exposiciones hormonales o ambientales durante el embarazo. Además, se ha observado que la edad materna avanzada (mayores de 35 años) y el sobrepeso u obesidad en la madre pueden incrementar el riesgo de desarrollar esta condición

El Dr. Daniel Cabezalí enfatiza la importancia de una evaluación temprana para determinar la gravedad de la malformación y planificar un tratamiento adecuado. Además de la evaluación funcional, el aspecto estético se aborda en el diagnóstico, ya que ambas dimensiones impactan significativamente en la calidad de vida del paciente.

Opciones de tratamiento y recuperación postoperatoria

El tratamiento del hipospadias es quirúrgico y tiene como objetivo reposicionar el meato urinario, corregir la incurvación y restaurar un aspecto anatómico normal. La intervención suele realizarse entre los seis meses y los dos años de edad, dependiendo de la complejidad del caso y de la necesidad de una estimulación hormonal previa para facilitar la cirugía. Es esencial abordar tanto la funcionalidad como la apariencia estética de la zona íntima para garantizar una solución integral.

Durante el postoperatorio, los pacientes requieren cuidados específicos, incluyendo el uso de vendajes y un seguimiento médico riguroso. Esto permite evaluar la evolución de la cirugía y evitar complicaciones, como infecciones o fistulas. El éxito del tratamiento del hipospadias está directamente relacionado con un diagnóstico temprano y una intervención oportuna.

El Dr. Daniel Cabezalí acompaña a las familias en todo el proceso, desde la identificación del problema hasta el seguimiento postquirúrgico, ofreciendo un tratamiento adaptado a las necesidades individuales de cada paciente. Este enfoque garantiza resultados que favorecen tanto la funcionalidad como la estética, contribuyendo al bienestar integral del niño.