En días con buen tiempo apetece aprovechar terrazas, balcones y jardines en cualquier hogar. Estos espacios se han vuelto muy codiciados desde que la pandemia modificó los hábitos de vida, y actualmente son elementos esenciales en la decoración de interiores. Hoy en día, es común ver terrazas decoradas con mobiliario moderno, plantas y, cada vez con más frecuencia, césped artificial. Este material ha ganado popularidad, incluso registrando un aumento en su demanda de un 209% en 2020, tendencia que se ha mantenido. Existen múltiples opciones en el mercado, dependiendo del lugar y del uso que se le quiera dar.
Uno de los aspectos clave al instalar césped artificial en una terraza es considerar el tipo de suelo. Según los expertos de Eurocesped, es importante preparar adecuadamente la superficie para obtener un buen resultado. Si el suelo no drena correctamente, es necesario solucionar los problemas de acumulación de agua antes de la instalación, especialmente en terrazas donde pueden formarse charcos.
El proceso de instalación de césped artificial es sencillo y se puede realizar en superficies como hormigón, baldosas o tierra. Lo más importante es asegurarse de que la base esté en condiciones óptimas para el drenaje del agua. Una vez preparada, el césped se coloca como si fuera una alfombra, recortándolo a la medida de la terraza. Las tiras de césped se unen entre sí mediante bandas autoadhesivas, creando una única superficie uniforme. Es fundamental fijar el césped únicamente por el perímetro, en lugar de pegarlo completamente al suelo, para garantizar una correcta instalación.
El mantenimiento del césped artificial es sencillo. Para limpiarlo, se recomienda usar una manguera y cepillarlo para mantenerlo en buen estado. También se puede aspirar o pasar una fregona con agua y jabón neutro. Dependiendo de la densidad y la altura de la fibra del césped, la sensación al pisarlo será más o menos natural.
Una pregunta común entre quienes eligen decorar su terraza o balcón con césped artificial es cómo limpiarlo y mantenerlo para asegurar su durabilidad. Los expertos coinciden en que debe cuidarse como cualquier otra superficie. Si se dispone de una toma de agua cercana, lo ideal es usar una manguera para enjuagar el césped y luego darle un cepillado para mantenerlo limpio. También se puede aspirar o pasar una fregona utilizando una mezcla de agua con jabón neutro.
Estos métodos de mantenimiento son adecuados para cualquier tipo de fibra utilizada en el césped artificial. Las diferencias entre los diversos modelos de césped se encuentran principalmente en la densidad, el color y la textura. Hay opciones que van desde los 27 milímetros de altura, que imitan el aspecto de la hierba recién cortada, hasta los 47 milímetros, que ofrecen una pisada más densa y un aspecto más natural.
Lo más recomendable es encontrar un equilibrio que combine una buena apariencia estética con la practicidad de mantenimiento, para disfrutar de un césped bonito y funcional durante más tiempo.
