Según los últimos datos del Observatorio de Emprendimiento de España, el número de emprendedores en 2024 ha vuelto a los niveles previos a la pandemia. Aun así, más de la mitad de estos nuevos empresarios expresan falta de confianza en la viabilidad de sus negocios. Esto se debe principalmente a un desconocimiento generalizado y a la falta de asesoramiento adecuado en las etapas iniciales.
El informe del Ministerio de Trabajo sobre trabajadores autónomos del primer trimestre de este año revela que en los primeros meses de 2024 había más de tres millones de trabajadores autónomos en España, representando un incremento del 1% con respecto al mismo período de 2023. Esto significa que aproximadamente 31.000 personas han optado por establecerse por su cuenta. Sin embargo, el 60% estos nuevos emprendedores teme que sus negocios no tengan oportunidades claras de supervivencia.
El riesgo de morir de éxito
Entre estos nuevos emprendedores, existe un fenómeno preocupante conocido como «morir de éxito«. Este término se refiere a aquellos empresarios que, aunque sus negocios van bien, se ven abrumados por el éxito hasta el punto de considerar cerrar sus operaciones. Estos emprendedores enfrentan varias dificultades:
Están constantemente atados a sus teléfonos móviles para atender llamadas, correos electrónicos y mensajes de clientes y proveedores.
Se sienten aislados debido a la dependencia de ellos mismos para el funcionamiento del negocio.
No pueden permitirse viajar, disfrutar de la familia o tener días libres sin conexiones laborales.
Están exhaustos y, a pesar de adorar lo que hacen, empiezan a considerar buscar empleo por cuenta ajena donde puedan encontrar más estabilidad y tiempo libre.
Esta situación se da cuando el emprendimiento se convierte en autoempleo, combinando la falta de libertad típica del trabajo asalariado con la precariedad del autónomo. Los principales factores que provocan que una empresa «muera de éxito» incluyen el desfase entre cobros y pagos, y el desconocimiento del tiempo y recursos necesarios para elaborar un producto o prestar un servicio.
Tener una empresa y trabajar 6 horas al día es posible
Paola Somoza, una emprendedora que ha vivido esta misma situación y estuvo a punto de “morir de éxito”, encontró una solución para poder gestionar su empresa, construir nuevos proyectos y trabajar solo seis horas al día, reservando el resto del tiempo para ella, su familia y amigos. A principios de este año, Somoza decidió compartir su experiencia y lanzó un programa de mentorado denominado «De Autoempleado a Empresario».
Este programa, que dura 10 semanas, incluye sesiones intensivas de consultoría 1 a 1 con ella, material de trabajo en casa y un proceso de acompañamiento posterior los siguientes 10 meses. Con el objetivo de ayudar a los autoempleados a dejar de improvisar y aprender a ganar de verdad: tiempo, dinero y el orgullo de conseguir sus objetivos.
El programa incluye 6 etapas clave:
Observar y entender el negocio
Trazar objetivos realistas y definir los procesos alcanzarlos
Presentación y estrategia de marca
Portafolios de servicios y productos
Experiencia de cliente memorable
Calendario y planificación de acciones.
Desde que lanzó el programa hace 9 meses, decenas de emprendedores y autoempleados han confiado en ella, destacando su “experiencia, creatividad y pasión para hacer las ideas tangibles”, “su capacidad para entender al cliente y ordenar conceptos”, “resultados visibles desde la primera hora de sesión”.
Este mes de septiembre, Somoza abre nuevamente su agenda para acompañar a aquellos interesados en dejar de sobrevivir con sus negocios y empezar a vivir de ellos, pueden agendar una cita con ella para iniciar este viaje de crecimiento y optimización a través de su página web: paolasomoza.com.