Deutsche Bank, el mayor banco de Alemania, registró un resultado negativo de 143 millones de euros en el segundo trimestre, frente al beneficio neto atribuido de 763 millones del mismo periodo de 2023, como consecuencia del impacto de la provisión de 1.300 millones asumida para hacer frente a litigios relacionados con la adquisición de Postbank.
La cifra de negocio de Deutsche Bank entre abril y junio alcanzó los 7.589 millones de euros, un 2,4% más que un año antes, a pesar del retroceso del 1% del negocio de banca corporativa, con ingresos de 1.922 millones, mientras que la banca privada facturó un 3% menos, hasta 2.332 millones.
Por contra, el negocio de banca de inversión registró una subida del 10% de los ingresos, hasta 2.599 millones de euros, mientras que la gestión de activos reportó ingresos de 663 millones, un 7% más.
Asimismo, la entidad asumió en el segundo trimestre un impacto adverso de 476 millones de euros por provisiones frente al riesgo de crédito, frente a los 401 millones del mismo intervalo de 2023.
Al cierre del segundo trimestre, la ratio de capital básico de máxima calidad de Deutsche Bank era del 13,5%, frente al 13,8% de un año antes.
De su lado, los costes ajustados ascendieron a 5.000 millones de euros en el segundo trimestre, un 2% más que en el segundo trimestre de 2023 y en línea con la orientación del banco de costes ajustados de 5.000 millones de euros por trimestre en 2024.
Asimismo, el banco avanzó más en su programa de eficiencia operativa de 2.500 millones de euros, que incluye la optimización de la plataforma en Alemania y reducciones de personal, con ahorros totales realizados o esperados gracias a las medidas ejecutadas de 1.500 millones de euros, incluidos 1.200 millones de euros en ahorros realizados.
Las reducciones de la fuerza laboral relacionadas con el programa de eficiencia operativa alcanzaron un total acumulado de 2.700 equivalentes a tiempo completo, incluidos 700 durante el segundo trimestre, casi el 80% del total planificado hasta finales de 2024.
En la primera mitad del año Deutsche Bank obtuvo un beneficio neto atribuido de 1.132 millones de euros, un 41% inferior al contabilizado en el primer semestre de 2023.
En cuanto a la cifra de negocio hasta junio, la entidad germana alcanzó los 15.368 millones de euros, un 1,8% más que un año antes, y las provisiones por riesgo de crédito alcanzaron los 915 millones, un 18,5% más.
En este sentido, la entidad destacó que los ingresos alcanzados en la primera mitad de 2024 han superado más del 50% de la previsión del banco para todo el año, que apuntaba a una cifra de negocio de alrededor de 30.000 millones de euros.
«Estos resultados reflejan la fortaleza operativa del Deutsche Bank», defendió Christian Sewing, consejero delegado del banco, quien destacó que la rentabilidad subyacente en el primer semestre fue la más alta desde 2011.
«Nuestros resultados del segundo trimestre y del primer semestre de 2024 nos posicionan bien para lograr resultados en 2025», añadió James von Moltke, director financiero. «De cara al futuro, anticipamos un impulso continuo de los ingresos a medida que nuestras inversiones estratégicas en crecimiento den frutos», añadió.
