Volvo Cars registró un beneficio neto casi un 23% superior durante el primer semestre de 2024, hasta los 9.200 millones de coronas suecas (más de 797 millones de euros) gracias a la política de contención de precios y costes del grupo.
Las ventas superaron los 388.000 coches en el semestre, cerca de un 14% más que hace un año, lo que le ha reportado un beneficio operativo de 12.700 millones de coronas suecas (más de 1.100 millones de euros), esto es, un 25,74% más que entre enero y junio de 2023.
Solo durante el segundo trimestre del ejercicio, el fabricante sueco ha informado de unas ganancias de 5.700 millones de coronas suecas (494 millones de euros), lo que se traduce en un repunte cercano al 63% en comparación con el mismo periodo de hace un año.
En el trimestre, las ventas minoristas globales aumentaron un 15% interanual, hasta alcanzar los 205.400 vehículos, gracias al buen desempeño de los vehículos electrificados –puros e híbridos enchufables– cuyas ventas crecieron un 43% en el segundo trimestre, en comparación con el mismo período del año anterior.
ELEVA EN 10 PUNTOS LA VENTA DE ELÉCTRICOS
Junto a ello, la participación de ventas de vehículos electrificados en el periodo fue del 48%, frente al 39% de hace un año. La cuota de ventas de coches totalmente eléctricos fue del 26%, frente al 16% del segundo trimestre de 2023.
Las acciones de Volvo se han revalorizado durante la sesión de este jueves en la Bolsa de Valores de Estocolmo en el entorno del 7,4% hasta cotizar sobre las 34,53 coronas suecas (cerca de 3 euros por título). La capitalización del grupo se ha incrementado casi un 5% desde enero.
IMPACTO DE LOS ARANCELES
Asimismo, Volvo ha reducido ligeramente su pronóstico de ventas de automóviles para este año ante el posible impacto que pueda tener en el mercado automovilístico la imposición de aranceles por parte de la Unión Europea a la importación de vehículos eléctricos procedente de China.
Ahora, la marca integrada en el grupo chino Geely, prevé un repunte de las ventas de entre el 12% y 15%, frente a una proyección anterior de, al menos, el 15%.
El fabricante ha ajustado su pronóstico debido a «»la incertidumbre en torno a esos aranceles comerciales y cómo eso puede afectar la demanda», ha asegurado el director ejecutivo, Jim Rowan, quien ha apuntado a que todavía confían en seguir apuntando «al extremo superior del rango».
ESTRATEGIA ELÉCTRICA
A este respecto, hace unas semanas, Volvo aseguró que pospondría los envíos de su modelo eléctrico fabricado en China, el EX3, ante la imposición de unos aranceles superiores al 100% que está provocando una desaceleración en la expansión de su nueva gama.
Sin embargo, con el objetivo de eludir estas trabas comerciales, el fabricante ya confirmó hace unos meses que comenzará a producir este SUV compacto en la planta que tienen en Gante (Bélgica) a partir de 2025.
En junio, Volvo inició la producción de su SUV eléctrico EX90 en la planta con la que cuenta la compañía en Charleston (Estados Unidos) y en el documento de este jueves advierte de que las primeras entregas a clientes están previstas que se completen durante el tercer trimestre del ejercicio.
Más allá de los conflictos comerciales, el grupo eleva un 28% su beneficio operativo durante el segundo trimestre del ejercicio, excluyendo las ganancias procedentes de las ‘joint venture’ y asociadas al grupo, hasta los 8.200 millones de coronas suecas (más de 710 millones de euros).