Instituto Panamericano de Tampico; Pioneros en Innovación Educativa en México

Por Remitido

En un mundo en constante cambio, la educación se convierte en un faro de transformación y crecimiento. En este artículo, se explora cómo Estonia, Finlandia han liderado la innovación educativa, y cómo Barcelona, una ciudad llena de historia y creatividad y Tampico en Tamaulipas, México una ciudad clave en Latinoamérica también se suman a esta revolución.

Estonia ha abrazado la tecnología en las aulas, desde la educación digital hasta la programación. Sus estudiantes aprenden habilidades digitales desde temprana edad. La mentalidad de “apunta alto y trabaja duro” impulsa a los jóvenes estonios a buscar soluciones creativas y emprender proyectos.

Por otro lado, Finlandia prioriza la equidad, asegurando que todos los niños tengan acceso a una educación de alta calidad. Sus maestros son altamente capacitados y valorados. Finlandia reduce la presión de las evaluaciones estandarizadas y se enfoca en el aprendizaje significativo. Los estudiantes se sienten menos presionados y más comprometidos.

En el país destaca una ciudad en particular, Barcelona, que se enorgullece de su enfoque en la educación experiencial. Los estudiantes aprenden en museos, plazas y calles, conectando la teoría con la vida real. Así mismo es un crisol de idiomas. Los estudiantes aquí no solo aprenden catalán y español, sino también inglés, francés y más. La diversidad lingüística es un activo valioso. 

En México, la ciudad de Tampico alberga importantes instituciones educativas que son referentes en el Estado de Tamaulipas. Este territorio es más grande que Estonia y Bélgica juntos. Entre estas instituciones, destaca el Instituto Panamericano de Tampico (IPT), una escuela que ofrece servicios desde el nivel maternal hasta la secundaria. A lo largo de 10 años consecutivos, los alumnos del IPT han sobresalido en competencias internacionales de robótica, astro ciencias y también han ganado competencias nacionales de matemáticas, física y química, destacándose significativamente frente a instituciones similares en el resto de América Latina.

Recientemente, se tuvo la oportunidad de conversar con uno de los directivos del IPT durante su visita a la Unión Europea. El Contador Martín Enrique Torres Lara, además de ser el Cónsul Honorario de Estonia en Tamaulipas, es profesor de Educación Empresarial en el colegio. Cuando se le pregunta sobre el sustento del éxito del IPT, compartió tres vertientes:

Convenios Estratégicos: A lo largo de su historia, el IPT ha establecido importantes convenios con organizaciones como la Asociación STEM, SPACE STATION EXPLORERS, la NASA, NARRATIVE4, el Aviation Youth Mentoring Program y el ISS MIMIC. Además, mantiene una estrecha relación con las autoridades de la República de Estonia, motivo de orgullo para el colegio.

Sistema Personalizado: El IPT ha implementado un sistema educativo personalizado que permite la transversalidad en todos los niveles. Esto ha facilitado la incorporación de programas americanos y europeos, adaptándolos a la realidad y entorno regional.

Equipo Docente Comprometido: El verdadero motor del éxito del IPT es su equipo docente. Este grupo se capacita y actualiza constantemente, obteniendo certificaciones en CAMBRIDGE, participando en programas del Johnson Space Center, UNOi y NARRATIVE4, entre otros. El liderazgo de su directora general, la Ingeniera Georgia Ana Gochicoa Humphries, egresada del Tecnológico de Monterrey, es fundamental para cristalizar todas estas iniciativas en una educación de calidad.

La innovación educativa es crucial para garantizar que el sistema educativo esté alineado con las demandas y los cambios de la sociedad y el mercado laboral. Permite adaptar las prácticas pedagógicas a las necesidades y características de los estudiantes promoviendo su desarrollo integral, por otro lado, fomenta el respeto, la responsabilidad, empatía y estimula la colaboración y trabajo en equipo. En última instancia, una institución educativa que prioriza la innovación educativa, está mejor preparada para enfrentar los retos del mundo globalizado y tecnológico, contribuyendo así al desarrollo sostenible y al progreso de la sociedad en donde se promueva.