El Ministerio de Educación de China anunció este jueves la creación de la primera carrera universitaria en gestión moderna de funerales, ofrecida por la Universidad Vocacional de Asuntos Civiles en Pekín, la cual también se enfocará en otras áreas de formación ante el crecimiento del mercado.
La nueva universidad, aprobada el pasado 15 de mayo y la única de nivel universitario bajo el Ministerio de Asuntos Civiles, ofrecerá programas de pregrado en gestión de salud inteligente, trabajo social, tecnología de dispositivos de asistencia para la rehabilitación, gestión moderna de funerales y gestión de servicios matrimoniales.
Para 2024, el centro universitario espera la matriculación de 500 estudiantes, de los cuales 120, provenientes de 16 provincias del gigante asiático, se especializarán en gestión moderna de funerales para la profesionalización del sector.
La creación de esta nueva carrera universitaria responde al crecimiento del mercado funerario en el gigante asiático, impulsado por el envejecimiento de la población (en 2022, el 19,8 % de la población china tenía más de 60 años según el Instituto de Investigación Económica de la Industria de China) y las tradiciones confucionistas que enfatizan el respeto a los difuntos y la piedad filial.
En 2022, el tamaño del mercado funerario chino alcanzó los 310 200 millones de yuanes (42 675 millones de dólares, 39 920 millones de euros), dominado por unidades estatales y con una alta fragmentación.
De acuerdo con datos del instituto, los servicios de cementerio representaron el 48 % del mercado con 149 904 millones de yuanes (20 623 millones de dólares, 19 291 millones de euros), mientras que los servicios funerarios propiamente dichos alcanzaron el 29 % con una suma de 90 047 millones de yuanes (12 388 millones de dólares, 11 588 millones de euros).
Proceso de regulación y modernización
Hasta finales de 2022, había un total de 4 474 entidades de servicios funerarios en todo el país, incluyendo 1 778 funerarias, 815 oficinas de gestión mortuoria y 1 761 cementerios administrados por el departamento de asuntos civiles; además, había 91 000 empleados en estas instituciones, de los cuales 49 000 trabajaban en pompas fúnebres.
El sector funerario chino se encuentra en un proceso de regulación y modernización, con políticas gubernamentales estrictas para el uso de cementerios y precios de servicios, una apertura gradual al capital privado y una diversificación de los servicios ofrecidos.
Además, se está aplicando tecnología moderna, como servicios de memorial en línea, cementerios virtuales e impresión 3D de urnas.
Sin embargo, el sector también enfrenta desafíos como la escasez de recursos de cementerios, los altos precios de los servicios y la calidad desigual de los mismos.
Las tendencias futuras del sector apuntan hacia la estandarización, la apertura del mercado, la aplicación de tecnología y la promoción de métodos funerarios más amigables con el medio ambiente.