Ha fallecido en París a los 80 años de edad, Françoise Hardy, una cantautora, modelo y actriz francesa. Sus canciones tienen un estilo mayormente melancólico y refleja las dudas, interrogantes y angustias que le despiertan los tormentos de las relaciones sentimentales y la nostalgia en general.
Françoise Hardy saltó a la fama a principios de la década de 1960, como figura destacada de la ola yé-yé. Además de su francés nativo, también cantó en inglés, italiano, alemán y español y, su carrera abarcó más de cincuenta años y publicó más de treinta álbumes de estudio.
El primer éxito que la llevó a consagrarse como artista en el extranjero fue “Tous les garçons et les filles”, en 1962, considerada actualmente como un verdadero himno generacional, del que se han vendido millones de copias. Al año siguiente, Hardy participó en el Festival de la canción de Eurovisión en 1963, en representación del principado de Mónaco, interpretando la balada L’amour s’en va con la que obtuvo el quinto lugar.
Se convirtió en musa de diseñadores de moda como André Courrèges, Yves Saint Laurent y Paco Rabanne, y colaboró con el fotógrafo Jean-Marie Périer. Hardy también ha ha hecho su contribución a la astrología al escribir extensamente sobre el tema desde la década de 1970. Además, fue autora de libros de ficción y no ficción publicados a partir del año 2000. Su autobiografía Le désespoir des singes… et autres bagatelles fue un éxito de ventas en Francia. Como figura pública, Hardy fue conocida por su timidez, su desencanto con la vida de las celebridades y su actitud autocrítica, atribuida a sus luchas de toda la vida contra la ansiedad y la inseguridad.
Se casó en 1981 con el actor y cantante francés Jack Dutronc, con quien tuvo un hijo,
Ayer murió a consecuencia de un cáncer de laringe en París, todo un icono de la música francesa de los años 60 y 70 del siglo pasado. Descanse en paz.
