Bruselas estima un superávit de 2.500 millones para la flota pesquera UE

Por Alfonso de la Mata

La Comisión Europea ha señalado este viernes que la flota pesquera de la UE puede esperar producir un valor añadido bruto de unos 2.500 millones de euros debido a la bajada del combustible si se tienen en cuenta los precios actuales, que se situaron entre 0,8 y 0,9 euros por litro en el primer trimestre de 2024.

«Se trata de una mejora significativa con respecto a 2022, cuando la mayoría de las flotas pesqueras de la UE eran incapaces de cubrir sus costes operativos», señala el Ejecutivo comunitario en sus orientaciones de posibilidades de pesca para el próximo año.

La Comunicación de Bruselas recuerda que después de que los precios del combustible alcanzaran un máximo de 1,2 euros por litro en 2022, estos han ido bajando gradualmente hasta situarse por debajo del euro por litro a principios de 2024, por lo que, si estos se mantienen a los niveles actuales, la flota comunitaria puede esperar un superávit de 2.500 millones, lo que permitirá cubrir costes operativos y los salarios de unos 122.000 pescadores.

Sin embargo, pese al descenso en los precios del combustible, la Comisión advierte de que la energía seguirá siendo uno de los principales costes para la flota pesquera de la UE en 2024, una «vulnerabilidad» que es resultado del alto nivel de intensidad energética de muchas flotas y una «gran dependencia» de los combustibles fósiles.

Aunque en general se espera que la mayoría de las flotas nacionales sean rentables en 2024, un análisis socioeconómico de la Comisión indica que varios segmentos de la flota se enfrentarán a condiciones «difíciles», especialmente aquellos que dependen de poblaciones sobreexplotadas y utilizan artes de pesca que consumen mucha energía.

Por contra, las flotas que dependen de poblaciones explotadas de forma sostenible y que han aumentado su eficiencia energética tienden a obtener mejores resultados y a generar salarios más elevados para sus tripulaciones, lo que constata «los importantes beneficios socioeconómicos de la conservación de las poblaciones y la eficiencia energética de las flotas pesqueras de la UE».

En este sentido, el informe apunta que las tasas de mortalidad por pesca han disminuido «considerablemente» en todas las zonas y destaca los niveles más bajos en el Golfo de Vizcaya y las zonas costeras ibéricas y en el caso de las poblaciones ampliamente distribuidas, como la caballa, la bacaladilla, el jurel y el arenque.

No obstante, Bruselas advierte de que, en el Mar del Norte, la tasa media de mortalidad sigue siendo más elevada que en otras zonas y alerta de que la presión pesquera en el Mediterráneo y el Mar Negro sigue estando un 20% por encima del nivel medio considerado sostenible y, aunque reconoce avances y mejoras en el estado de algunas poblaciones, pide «más medidas y un mayor compromiso para hacer frente a la situación».

Para lograr ese equilibrio entre la rentabilidad del sector y la sostenibilidad de las poblaciones, las orientaciones de la Comisión para las posibilidades de pesca en 2025 tratarán de permitir que la recuperación de las especies y, al mismo tiempo, impulsar la resiliencia de los pescadores.